viernes, 19 de junio de 2015

Por Cádiz sí se puede





El nuevo alcalde de Cádiz, José María González Santos, profesor de Historia y más conocido como  Kichi, haciendo bueno aquello de que “Por Cádiz sí se puede”, ha decidido sustituir el retrato de Juan Carlos de Borbón, que conservaba en su despacho la anterior alcaldesa del PP, Teófila Martínez, por  el que fuera primer alcalde y presidente de su Cantón durante la Primera República, Fermín Salvochea Álvarez. A mi entender, el retrato de Juan Carlos I estaba fuera de lugar en el Ayuntamiento, al hacer un año justo que éste había abdicado de sus funciones en la Jefatura del Estado. Salvochea, a mi entender hizo mucho más por la “Tacita de Plata” que el rey emérito. Salvochea fue un gaditano ilustre y a cada uno hay que darle lo suyo. Fue alcalde en 1883 cuando contaba 31 años. Pero años antes fue hombre de confianza de Juan Prim, miembro de la Comuna de Cádiz y segundo comandante de un batallón de “Voluntarios de la Libertad” en 1868 hasta el 11 de diciembre, fecha en la que tras entregarse fue  encarcelado en la fortaleza de  Santa Catalina. En 1869 salió elegido diputado a Cortes Constituyentes aunque el Gobierno no reconociera esa elección. Como ha quedado suficientemente descrito por sus biógrafos, Salvochea organizó guerrillas armadas contra el Gobierno en la Sierra de Cádiz, tomando Alcalá de los Gazules, hasta ser derrotado por las tropas gubernamentales y le obligaron a buscar refugio en Gibraltar. En 1871, gracias a la amnistía promulgada por el nuevo rey Amadeo de Saboya volvió a Cádiz. Durante su mandato tomó numerosas medidas para limitar la influencia de la iglesia. Sustituyó en las escuelas la enseñanza religiosa por la de "moral universal". Implantó la jornada laboral de ocho horas, se suprimieron las fiestas religiosas y se creó una fiesta cívica del advenimiento de la República Federal. Al disolverse la Primera República, fue apresado por las tropas del general Pavía, juzgado en Sevilla y condenado a cadena perpetua en el Peñón de Vélez de la Gomera y en Ceuta. Renunció al indulto que le consiguió el Ayuntamiento de Cádiz en 1883, se fugó a Marruecos y de allí pasó a Francia. Retornó a Cádiz, después de la amnistía tras la muerte de Alfonso XII, en 1885. En 1886 fundó el periódico El Socialismo, donde reivindicaba la huelga general como herramienta de lucha, por lo que pasó varias veces por la cárcel y fue clausurado su periódico. Organizó los primeros actos por el Primero de Mayo en Cádiz en 1890, siendo detenido de nuevo. Estando en prisión tuvo lugar el Motín Agrario de Jerez de la Frontera de 1892 en el que fue implicado por falsos testimonios y por el que fue condenado a 12 años de cárcel. Una nueva amnistía le permitió salir de la cárcel en 1899 y volvió a Cádiz. Allí conoció al médico anarquista sevillano Pedro Vallina y juntos partieron hacia Madrid, viviendo de forma muy austera, traduciendo algunos libros, y trabajando en diarios como El Liberal, El Heraldo o El País. Con motivo de la coronación de Alfonso XIII en 1902 fue detenido junto con otros anarquistas, acusados de tener planeado lanzar unos explosivos cuando el rey llegase al Congreso. Cinco años después regresó enfermo a Cádiz y falleció el 28 de septiembre de 1907. Durante su entierro, empezó a llover de forma torrencial y cuando la comitiva pasaba por el Ayuntamiento, el alcalde ordenó que el féretro entrara en la Casa Consistorial hasta que escampase. En Cádiz hay un dicho popular que dice: "Llueve más que el día que enterraron a Bigote”, nombre cariñoso con el que era conocido Salvochea. Su figura fue novelada por Blasco Ibáñez en La bodega, y por Valle-Inclán en Baza de espadas. En la Guerra Civil, una de las columnas de la CNT que luchó en Aragón contra las tropas sublevadas, tomó el nombre de Salvochea. En la década de los 80 el ayuntamiento de Cádiz, le dedicó una calle y le hizo un busto. Fue hijo único del adinerado Fermín Salvochea Terry, de origen navarro y dedicado al comercio de vinos, y de María del Pilar Álvarez, prima carnal de Juan Álvarez Mendizábal.

No hay comentarios: