jueves, 6 de julio de 2017

¿Fraude de ley?




A mi entender, si todos los problemas de los sanfermines de este año consisten en haber colocado una ikurriña en el balcón del Ayuntamiento de Pamplona el aparente problema no es un problema. No se debe sacar punta a asuntos banales. Decir que con ello se desafía a los tribunales significa que deberían cambiarse determinadas leyes para hacer normal lo que los ciudadanos entienden que así lo es. Lo que molesta a una parte de la sociedad de Pamplona es, digámoslo claro, que el alcalde, Joseba Asirón sea de Bildu. El alcalde justificó tal medida alegando que existía un informe jurídico que asegura que “interpretando en conjunto la normativa estatal y foral, estas normas no obligan ni impiden al Consistorio colocar la europea o la ikurriña”. De ser así, ¿dónde está el fraude de ley? Politizar las fiestas presentando sendos recursos, como han hecho Unión del Pueblo Navarro y la Delegación del Gobierno, se me antoja como una forma estúpida de marear la perdiz. También está castigada por las leyes la corrupción de los partidos políticos y aquí no pasa nada, o pasa muy poco. A la delegada del Gobierno de Navarra, Carmen Alba Orduna, le recordaría que el partido político al que pertenece, el Partido Popular, es la única formación política investigada en España por presunta corrupción. La delegada del Gobierno debería procurar que no se repitan los desmanes y las agresiones sexuales del año pasado, entre ellos la presunta violación de cinco individuos a una mujer de 19 años. Eso parece más serio a ojos de los ciudadanos  y produce más repulsa que colocar una ikurriña en el balcón del Ayuntamiento de Pamplona, una capital de provincia donde las calles se rotulan en castellano y en vascuence. Lo que ya no es de recibo, que todo hay que decirlo, es la enorme pancarta desplegada en apoyo a los agresores de Alsasua ni la enorme estelada en apoyo a la independencia de Cataluña. Siempre hay individuos que intentan pescar en río revuelto, incluido el Arga.

No hay comentarios: