jueves, 8 de noviembre de 2012

Entre convulsiones




Veamos. Si la CE pronostica que España  incumplirá el déficit y que el crecimiento no regresará hasta 2014, con un aumento del 0,8 % del PIB, quiere decirse que con ese ridículo aumento del PIB tampoco se creará empleo. En esta economía globalizada, hasta los memos saben que para que España cree puestos de trabajo consolidados debe crecer como mínimo al 2% anual. Mientras esas cosas no sucedan, crecerá la hambruna y aumentará el desconcierto de unos ciudadanos hartos de que tanto mequetrefe inepto para la política pise las moquetas de los despachos oficiales. Había que hacer en España una reforma del mercado de trabajo adaptada a la horma del zapato de Merkel. Y así se hizo. Merkel manda y Rajoy obedece. Había que subir en España el IVA por imposición de Bruselas. Pues Rajoy subió el IVA y el IRPF, lo segundo antes que lo primero, sin que nadie se lo mandase. Y como Merkel quería cobrar su deuda, hubo que pedir un rescate de hasta 100.000 millones (el 10% de la riqueza que produce España en un año) al Eurogrupo para socorrer, es decir, recapitalizar el sistema financiero de unos bancos avariciosos que financiaron la madre de todas las burbujas y de unas cajas de ahorro que habían dejado de cumplir la misión para las que habían sido creadas, ahora en manos de unos políticos autonómicos descerebrados que derrochaban sin cuento. Y como no podía ser de otra manera, llegaron las “recomendaciones” de Bruselas: embridar el gasto de las comunidades autónomas, elevar el IVA, acelerar la reforma de las pensiones y endurecer todavía un poco más la reforma laboral, entre otros aspectos. Pero hay otra vergüenza pendiente. El tema de las los impagos de hipotecas y su correspondientes desahucios. Como hoy señala El País, “La abogada general del Tribunal de Justicia de la UE, Juliane Kokott, ha dictaminado este jueves que la ley española de desahucios vulnera la normativa comunitaria porque no garantiza una protección eficaz de los consumidores frente a posibles cláusulas contractuales abusivas en las hipotecas (…) algunos jueces bucean en la legislación para evitar desahucios mientras denuncian usura, abusos y un enriquecimiento injusto de los bancos”. En esas nos encontramos. Y ahora, cuando los españoles estamos rebozados en el merengue, llega el ágil Pizarro, que desayuna con tenedor de plata, eructa cloroformo y trata de ayudarnos por misericordia, y señala que él invertiría en España si estuviese al frente de una gestora de capital riesgo. Asegura que no se volverán a ver valoraciones tan atractivas como las actuales en este país”. Pues nada, le haremos caso cuando atisbemos los primeros brotes verdes… en el Valle de Josafat.

martes, 6 de noviembre de 2012

La soldadesca de Artur Mas




Se murió Pepe Rubianes, el protagonista de una intensa polémica por su intervención el 20 de enero de 2006 en el programa “El Club” de TV3. Posteriormente  matizó que “yo insulté a la España que mató a Lorca”. Igual podría haber dicho a Lluís Companys o al coronel Escobar, que fueron fusilados en los fosos de Monjuit. Y a Pepe Rubianes, fallecido el 1 de marzo de 2009, le ha salido ahora un apóstol, un animador cultural “post mortem”, o sea, otro insultador que se crece ante los medios, en este caso el “El Periódico de Cataluña”, donde Paco Ibáñez se ha declarado “soldado para lo que quieran los catalanes”. Un “soldado” que, curiosamente, se pasó media vida en los escenarios cantando en castellano una adaptación de “La mala reputación”, de Brassens, donde entonaba aquello de “yo me quedo en la cama igual, que la música militar nunca me supo levantar”. ¿Recuerdan? Pues bien, ahora resulta que es un soldado mercenario al servicio de Artur Mas. ¡Menos mal que es valenciano! De haber sido de Sitges o de Villanueva y Geltrú no sabemos qué tipo de chamarrita de los milicos se hubiese puesto sobre los hombros, si de general de garita,  de sargento de cuchara, o de capitán de la escala de reserva que con la picha abre latas de conserva. “Estas cosas de la milicia siempre tiene su aquel”, como decía un amigo de Calatayud que ahora se dedica a cultivar fresones y que fue cabo primero reenganchado, que sirvió en Caballería a las órdenes del general Adolfo Esteban Ascensión, tío de Alfonso Ussía, y que cuando murió, en 2007, era el último laureado vivo a título individual por su acción heroica en el Sexto de Numancia. Paco Ibáñez declara en ese diario que “el referéndum independentista es el deseo de los que están hartos de ser humilladosy que es “una indecencia lo que han hecho con Cataluña estos chulos que están en el poder”. Estos rancios cantautores, cuando ya no venden discos, se dedican a lo que verdaderamente saben hacer: crear polémica para que se siga hablando de ellos aunque sea para mal.

lunes, 5 de noviembre de 2012

El brindis al sol de un ministro




El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha hecho hoy unas declaraciones en la Asamblea General de Interpol, celebrada en Roma, que yo, en su lugar, no me hubiese arriesgado a hacer. El ministro entiende, y así lo ha manifestado sin despeinarse, que “tras largos y dolorosos años de lucha con más de ochocientos muertos y miles de heridos en sus espaldas, la banda terrorista ETA ha sido derrotada”. El ministro, a mi entender, debería ser más consecuente y no recordarnos el último parte de guerra dado desde Burgos en 1939: “En el día de hoy, cautivo y desarmado el ejército rojo…”,  por una simple razón: la banda terrorista no está decapitada. En efecto, hay muchos terroristas presos en las cáceles españolas y en las francesas, pero la triste realidad es que ETA no ha dejado las armas ni lleva intención de hacerlo.  Por tanto, al no estar esa organización vasca ni cautiva (en su totalidad) ni desarmada, quiere decirse que puede volver a hacer estragos y a asesinar inocentes en cualquier momento. El “cese definitivo” en su actividad terrorista vendrá el día que pida perdón por sus horrendos crímenes a los familiares de las víctimas, que entreguen todas sus armas y explosivos y que se pongan a disposición de la Justicia para cumplir condena en instituciones penitenciarias. Mientras esas cosas no sucedan, sería una postura seria y de rigor que el ministro se abstuviera de hacer brindis al sol. Todos los ciudadanos respetuosos con la Ley deseamos que la banda terrorista desaparezca para siempre de nuestras vidas y de nuestras ciudades y deje de proyectar esa sombra alargada de ciprés de cementerio. Tenemos derecho a vivir en paz. Pero echar las campanas al vuelo, como acaba de hacer el ministro Fernández hoy en Roma, se me antoja más como el deseo de un hombre de bien, que lo es, que la certeza de una realidad preñada de azoramientos e incertidumbres difícilmente superables por el común de los ciudadanos.

Cataluña es parte indisoluble de España



Manuel Martín Ferrand, que no da puntada sin hilo, escribe hoy en República.com que “Los nacionalismos son, según demuestra la Historia, las larvas del fascismo y, además, un mecanismo para el disimulo de un fracaso gestor. Cataluña es una evidencia de ello y Mas el paradigma del intento. Su último viaje a Moscú – ¡hasta los gatos quieren zapatos! – resume expresivamente muchos de los elementos que definen su ‘ideario’ político: manías de grandeza, incapacidad organizativa, derroche del dinero público, suntuosidad imperial y gran capacidad para hacer el ridículo”. El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, también Almunia, ya han dejado claro que Cataluña no podría obtener nada de la CE fuera de España. Pujol, por otro lado, compara Cataluña con Estonia, Eslovenia y Eslovaquia. Queda claro que ni Mas ni Pujol han digerido la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut de 30 de marzo de 2006 (el PP presentó un recurso de inconstitucionalidad el 31 de julio de ese año) siendo presidente de la Generalidad Maragall y Mas jefe de la Oposición. Y en la resolución el TC con su “fundamento jurídico conclusivo” quedó claro que Cataluña no era una nación, como se pretendía asentar en el Preámbulo, además de las correspondientes aclaraciones sobre las interpretaciones del TC en los siguientes artículos: el artículo 5, sobre derechos históricos; el 8, sobre los símbolos nacionales de Cataluña; el 34, sobre la disponibilidad lingüística de los comercios y negocios; el 50.2, sobre el fomento del catalán; el 95.2, sobre la competencia del Tribunal Supremo para unificar doctrina; el 110, sobre competencias exclusivas de la Generalidad y sus potestades legislativas, ejecutivas y reglamentarias (que tienen como límite el artículo 149 de la Constitución Española); el 129, sobre el derecho civil catalán; el 183.1, sobre la Comisión bilateral Estado-Comunidad Autónoma para tratar competencias exclusivas del Estado; sobre Disposición adicional tercera, apartado 1, sobre infraestructuras del Estado; y las Disposiciones adicionales sobre la cesión de IRPF, IVA y otros impuestos. Por si ello fuera poco, el TC declaró 14 artículos inconstitucionales, o sea, el artículo 6, sobre lengua y nombres cooficiales; el 76, sobre el carácter vinculante de los dictámenes del Consejo de Garantías Estatutarias; el 78, sobre algunas funciones del Síndico de Agravios de Cataluña; el 95.5, sobre el Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña; el 97, 98, 99, 100 y 101 sobre el Consejo de Justicia de Cataluña; el 111, sobre las competencias compartidas entre el Estado y la Generalidad de Cataluña; el 120.2, sobre competencias de la Generalidad en cajas de ahorro; el 126.2, sobre competencia compartida en materia de crédito, banca, seguros y mutualidades no integradas en el sistema de seguridad social; y el 206.3, sobre el nivel y cálculo de la participación de Cataluña en el rendimiento de los tributos estatales y mecanismos de nivelación y solidaridad.

sábado, 3 de noviembre de 2012

Cortinas de humo




Las grandes empresas están a favor de agrupar festivos de cara al año que viene. Pero las pequeñas empresas no. Las cafeterías, los modestos hoteles, las agencias de viajes, las empresas de transportes de viajeros y, cómo no, hasta las tiendas de “chuches”, saben que los puentes constituyen un alivio para sus modestos negocios. Nunca llueve a gusto de todos y cada empresario arrima el ascua a su sardina. Cuenta el diario Abc que “La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, espera cerrar antes de que acabe el año un acuerdo para reducir el número de puentes festivos”. Por otro lado, la prensa señala que 2013 contará con un festivo menos. No es cierto. Cada comunidad autónoma cuenta con catorce días festivos. Lo que sucede es que 8 de diciembre, día de la Inmaculada, caerá en domingo pero se trasladará al lunes. Ahora lo que toca es negociar con los agentes sociales, la Conferencia Episcopal y las comunidades autónomas las fiestas de entre semana y su traslado a los lunes, para evitar los días de puente, salvo Navidad, la Fiesta del Trabajo y la Fiesta Nacional de España. Espero que me digan las lumbreras del Gobierno en qué día de la semana se habrán de celebrar  Jueves y Viernes Santo. A mi entender lo que realmente interesa a cualquier empresario que se precie de serlo es el cómputo global de las horas rendidas por cada trabajador, de acuerdo con cada convenio laboral. Todo lo demás son ganas de marear la perdiz. En España se trastoca la hora oficial para ahorrar no sabemos cuánto; el calendario, para que el rendimiento en el trabajo sea mayor; se quita la paga extra de diciembre a los funcionarios públicos para reducir la deuda del Estado; y como no hay más cera que la que arde, invitan a los parados sin ningún tipo de recursos (más de un millón setecientos mil) a tomar el bodrio, o sea, la sopa de convento. En este país los ricos son cada vez más ricos, los pobres cada vez más pobres y el Gobierno se troca en más ineficaz cada fecha que transcurre. Ante esta calamitosa situación, lo mejor será trasladar seis días de la semana a lunes para que, como sucedió tras la reconversión industrial de Vigo y el drama de los astilleros “Naval Gijón”, todos podamos estar tumbados al sol. Los responsables del Gobierno han tomado a los ciudadanos el número cambiado y manejan como trileros, además de la mentira, el “truco o trato”, como si cada día fuera  Halloveen y Mariano Rajoy ejerciera  su vocación de imitar a Jack el de la Linterna.

viernes, 2 de noviembre de 2012

Detalles que se agradecen




El mensaje de una paloma pudo cambiar el curso de la Segunda Guerra Mundial. No se sabe todavía qué cuenta el mensaje cifrado encontrado en una de sus patas y encontrada en el interior de una chimenea de Bletchingly, en la casa de un tal David Martin. Han pasado 70 años de aquel vuelo fallido y el mensaje de la paloma en cuestión ha perdido ya todo interés bélico, aunque estoy seguro de que será de gran interés para los historiadores. Se escriben ríos de tinta sobre los soldados fallecidos en combate en aquellos cinco años de infierno y de los “daños colaterales” sobrellevados por el personal civil ajeno a cualquier ofensiva, como sucede siempre en toda guerra, pero ni los ingleses ni los alemanes fueron capaces de erigir una figura, al estilo de la que tiene Viriato en Zamora, en memoria de las más de 250.000 palomas mensajeras que cumplieron una importante misión histórica con los columbogramas. Y ya que aludo al caudillo lusitano, me entero por “La opinión de Zamora” que el escultor Eduardo Barrón, muerto en Madrid en 1911, enterrado en la Sacramental de San Justo y autor de la figura de Viriato en bronce, será el primero en estar enterrado, una vez sean exhumados y trasladados sus restos desde Madrid, en el nuevo Panteón de Zamoranos Ilustres, según ha anunciado la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón. Son detalles que se agradecen. Ya lo creo.

jueves, 1 de noviembre de 2012

Rebozados en estrume




Cuenta hoy Marcello en República.com que “el activismo de marketing del Rey y la Familia Real, y su omnipresencia en TVE trae de cabeza al Gobierno, con viajes que no vienen a cuento y multitud de actos públicos y extrañas visitas, algunas de las cuales no han salido bien como aquella de The New York Times, la Fiesta Nacional, y eso del “cuchillo en los dientes”, o la “España para llorar”, etc. El monarca parece por momentos el ministro de propaganda del régimen actual, y en el silencio y escapismo de Rajoy se adivina una extraña pretensión del presidente de ocupar discretamente la “jefatura del Estado”. Está claro que el Gobierno necesita una crisis en profundidad para cambiar a una vicepresidenta a la que le viene grande el cargo; y, también, a ciertos ministros “que crean más problemas que soluciones o que no están a la altura de las circunstancias”. Los casos de Wert  y de Báñez son de libro. En fin, es lo que hay y esos son los bueyes… Pero hoy, 1 de noviembre, lo que tocaría es hablar de difuntos, del encarecimiento del IVA en 13 puntos en los entierros y de todas esas zarandajas del Más Acá y del Más Allá. Pero no lo voy a hacer. Hago mío lo que cuenta en La Vanguardia la inconmensurable  Pilar Rahola: “Sólo sé que cuando acecha cerca [la muerte] y se lleva la gente que queremos, nos arranca la piel a jirones y el alma se queda colgada de una percha de dolor, incapaz de volver al cuerpo”. Pues eso.