jueves, 30 de diciembre de 2010

Pesadilla economicista

En un excelente trabajo periodístico publicado hoy en El Plural.com bajo el título “Marginalidad, un camino sin retorno”, Carlos Carnicero, en un alarde de sensibilidad que comparto y que debería hacernos reflexionar a todos los españoles, pone de manifiesto lo que se esconde detrás de un “homeless”, de un vagabundo. Todo comienza, y así lo expresa, “cuando un padre de familia se queda en el paro, su compañera también, comienzan a beber, se produce el divorcio y el final es dormir debajo de unos cartones de por vida. (…) La frontera de los cincuenta años –excepto en profesiones muy especializadas- es una barrera sin retorno para quien se introduce en el desempleo”. Un poco más adelante, Carnicero analiza de forma descarnada lo que está aconteciendo en estos momentos: “La reforma del mercado laboral ha significado más precariedad, abaratamiento del despido, sin modificar los sistemas de formación profesional y sin garantizar para nada un crecimiento del empleo: en síntesis, pérdida de derechos del trabajador sin ningún compromiso de los empresarios. Las subidas de las tarifas eléctricas, del gas y del ferrocarril, incluso de cercanías, revela una falta de sensibilidad de un gobierno que ha sustituido el concepto de redistribución de la riqueza por la aplicación del precio al valor de las cosas según los parámetros puramente economicistas. La anunciada reforma de las pensiones coincide en el tiempo con ERES de decenas de miles de personas que se van a jubilar anticipadamente con un cargo importante a los fondos del Estado, para facilitar la viabilidad de grandes empresas, incluidas las cajas de ahorro privatizadas”(…) “Porque además, son estos personajes que ganan estas cantidades de dinero (refiriéndose a Francisco González, al presidente de Iberdrola, a Botín, etcétera) los que encabezan la manifestación para la reducción de los sueldos, el abaratamiento del despido y la prolongación de la vida laboral. En su osadía está su impunidad, porque una sociedad anestesiada ha aceptado como inevitable lo que es impresentable”. (…) “La respuesta tradicional es que las empresas privadas pueden hacer con su dinero lo que quieran. No es cierto. No se trata de un valor contable sino de un principio ético”. (…) “En su osadía está su impunidad, porque una sociedad anestesiada ha aceptado como inevitable lo que es impresentable”. La exposición de Carnicero es mucho más larga. Pero dejémoslo ahí. No la toquemos más, que así es la rosa.

miércoles, 29 de diciembre de 2010

La metáfora de Sebastián

¿Qué quieren que les diga? A mí, personalmente, la postura neoliberal adoptada por el Gobierno no me ha cogido de sorpresa. Este gobierno tiene de socialista lo mismo que yo de obispo auxiliar. Lo del puño y la rosa es una metáfora que no llegamos a descifrar. Pero, bueno, Zetapé nos tiene a todos cogidos por el BOE, que es como trincarnos por la rosa de la entrepierna con el puño metafórico y no destraba por más que vociferemos. Y para terminar de adornar un mandato desastroso, llega el ministro de Industria, un tal Sebastián, y nos informa que la tremenda subida de la luz, eso que él llama Tarifa de Último Recurso, no tiene importancia, que “su coste equivale a poco más que a la toma de un café por persona al mes”. Y se ha quedado tan ancho. Este Miguel Sebastián nos toma a los españoles por tontos del haba. Por ahí no paso. Tonto él, cuando sacó una revista con la foto de una señora a Ruiz Gallardón en televisión dando por hecho que con esas malas artes ganaría la Alcaldía de Madrid. Este Gobierno, con Sebastián incluido, huele a podrido desde hace mucho tiempo. Su postura neoliberal de última hora, su puesta en escena en la triste salida del armario, obligado o no por Europa, que me da igual, le condena al purgatorio de la oposición hasta que reine en España la infanta Leonor, si es que llega a reinar. Este Sebastián, que todavía me debe una bombilla de bajo consumo, ha dicho para calmar nuestros alborotados ánimos, que “se da por concluido el proceso de revisión de costes hasta 2013”. ¿Ustedes se lo creen? Cuando dice 2013, ha querido decir que no habrá nuevas subidas tarifarias hasta mitad del año que ahora comienza. Pero, claro, lo dice en alegoría, como hace Zetapé con el puño, la rosa y el juego de la sucesión. “Sólo lo sabe mi mujer y otro”, ha dicho tajante. Esas cosas las debe tener apuntadas en el cuaderno rojo, donde dejó anotado cómo ganar ahora una guerra que perdió su abuelo hace tres cuartos de siglo. Paso de este soñador de batallas imposibles. A mí, como si se la pica un pollo…

martes, 28 de diciembre de 2010

Cartas desde su celda

Parece que me estuviese refiriendo a la obra literaria de Bécquer. Pero no es así. Los políticos españoles se ponen muy nerviosos cada vez que el The Wall Street Journal cuenta alguna noticia sobre España, sobre todo si tal noticia se refiere a temas económicos. A mí no me causa ninguna impresión que desde el exterior, sobre todo desde el otro lado del Charco, se vea a nuestro país con una lente desenfocada. A veces aciertan en el diagnóstico. Otras veces patinan como si estuvieran bailando el fox-trot sobre una pista de hielo. Hoy martes, ese diario publica una carta facilitada por Arnaldo Otegi desde la cárcel bajo el título de «Grupo vasco hace oferta de paz». Que yo sepa, ETA tiene sobre sus espaldas 829 asesinatos en sus 42 años de existencia. Otegi señala en su comunicado, entre otras cosas, que «se encuentra preparada para abandonar la violencia y seguir una estrategia pacífica para crear un estado independiente vasco». En ese sentido, Pérez Rubalcaba ha estado firme en sus declaraciones: “el alto el fuego de 2006 demostró que la tregua no vale porque, al mismo tiempo que se negociaba con el Gobierno, se cometió el brutal atentado de la T-4, en el que murieron dos personas”. A mi entender no sirve el propósito de enmienda, aunque sea consciente de que por algo habrá que empezar. Y lo primero para ese comienzo pasa por la necesidad de llevar a cabo el cumplimiento íntegro de las penas impuestas en los tribunales de Justicia. No se les puede devolver la vida a casi un millar de inocentes, y el “arrepentimiento” de los miembros de la banda terrorista no debe constituir motivo suficiente como para que se puedan producir extrañamientos ni indultos para sus responsables con asesinatos probados por gracia especial del Consejo de Ministros. Eso significaría un insulto para los demócratas que sustentamos este Gobierno con nuestros impuestos y somos respetuosos con el Código Penal y el resto de las leyes emanadas desde el Congreso de los Diputados. Los terroristas, como primera medida deben entregar las armas de inmediato. Como segunda, respetar la Constitución Española. No sirven ni las treguas ni las negociaciones con el Gobierno. En un Estado de derecho no se puede negociar con asesinos. El Estado dispone de los medios necesarios para detenerlos y entregarlos a la justicia sin más contemplaciones. Tampoco puede admitirse que The Wall Street Journal “aclare” a sus lectores que “ETA es un grupo vasco, que defiende una lengua y cultura prelatinas y ofrece la paz al Gobierno español”. Contado de esa manera tan desafortunada, los norteamericanos, a los que les viene justo saber dónde se encuentra España en el globo terráqueo, como bien señala al respecto Libertad Digital, pueden pensar que tal grupo de asesinos vascos “son el Orfeón Donostiarra o el Athletic de Bilbao”.

domingo, 26 de diciembre de 2010

Turrón o guirlache

Comenta Heraldo de Aragón que “el PSOE hace suyo el discurso del Rey para asegurar que avala las reformas de Zapatero”. Me parece que la noticia hubiera sido más exacta cambiando el orden de los protagonistas. A mi entender, ha sido el Rey el que ha hecho suyo el mensaje del PSOE para avalar las reformas del Presidente, como no podía ser de otra manera. Sin pretender dármelas de adivino, ¡ojala lo fuese!, mi personal olfato sobre el momento presente me informa de que tal discurso real, (elaborado a la medida de un Jefe de Estado, con unos poderes exiguos contemplados en la Constitución Española, por un Ejecutivo sin brújula y en evidente estado de descomposición) fue el “trágala” de la fórmula magistral lograda en la rebotica de La Moncloa para que el Rey pudiese salir airoso del brete, por encima del deseo de buena voluntad hacia los españoles sobre lo que ya se anticipa como un “feliz” año peor. Y esa fórmula magistral, para que surgiera el efecto deseado, sólo la podía concebir un químico, o sea, Pérez Rubalcaba. El mensaje navideño tuvo, como sucede con todos los específicos de laboratorio, determinados efectos secundarios. Tales efectos no fueron otros distintos que una irritación de la Izquierda (la Izquierda real, no esos neoliberales del puño y la rosa) por el apoyo del Rey a los recortes sociales.

En ese mismo diario (páginas 6 y 7) Jesús Morales entrevista a Manuel Pizarro, otro que tal baila, desertor del Congreso de los Diputados, donde aclara su “diagnóstico” sobre la salud de España con el aplomo de Gregorio Marañón. Por cierto, Marañón decía que el mejor diagnóstico consistía en sentarse en una silla junto al enfermo y observar su aspecto anímico. Pizarro, que yo sepa, dejó el escaño del Congreso hace diez meses. También el Comité Ejecutivo del PP en Madrid por deseos de Esperanza Aguirre. El número dos de Rajoy en las pasadas elecciones permanece desde entonces sentado en el sillón de uno de los despachos más grandes del mundo, donde estudia la manera de ver cómo puede coger el toro por los cuernos. Pero no el toro de España, ese toro negro de Domecq que está plantado, desafiante, en los oteros junto a las carreteras. O sea, ese toro negro y astifino que algunos patrioteros llevan plasmados en las banderas nacionales que venden los chinos y que acabará matándonos en el embroque. El “fichaje estrella” no es torero de postín ni lleva traje de luces montera ni se arriesga a que un bovino le pueda hacer un siete en la taleguilla. Observa el desarrollo de la lidia en la barrera de sombra y jamás se le pasó por la cabeza ser espontáneo y lanzarse arena del redondel a pecho descubierto. El nieto del guardia civil (que no llevaba montera sino tricornio) que fuera nombrado gobernador civil de Teruel en 1947 y que se encargó de la represión del maquis en la zona; el hijo del que fuera procurador en Cortes por el Tercio Familiar durante la época franquista (que tampoco llevaba montera ni tricornio sino chaquetilla blanca), convertido ahora en presidente del Consejo Social de la Universidad Autónoma de Madrid, espera paciente a la puerta de su enorme despacho para ver pasar el cadáver de su enemigo, es decir, la nueva convocatoria de los españoles a las urnas, el cantado triunfo de Rajoy por goleada y la consiguiente pregunta tan española sobre “que hay de lo mío”. La historia siempre se repite. Y él lo sabe.

sábado, 25 de diciembre de 2010

¿Será eso la Ley Sinde?

La noticia es escueta: “La Guardia Civil se ha incautado de 1.500 trajes de pastorcillo falsificados que, aprovechando las fiestas navideñas, estaban siendo vendidos en un polígono industrial del municipio madrileño de Fuenlabrada”. Me atenazan las dudas. Vamos a ver: ¿Cómo sabe la Guardia Civil qué trajes de pastorcillos son falsificaciones? Suponiendo que alguien sepa contestar esa pregunta, ¿en qué se nota la falsificación? ¿Acaso los trajes de los pastores tienen que estar confeccionados en La Alpujarra, en el alcarreño Solanillo del Extremo, o en el municipio leonés de Mansilla de las Mulas? ¿Estamos seguros de que las albarcas de Revilla se fabricaron en Cantabria? ¿Nos consta a los españoles que la toga del juez de Calatayud es del sastre zaragozano “Pedraza”, o del madrileño “Gavilanes”? ¿Y si estuviese hilvanada en Guangzhou, o en Changsha? ¡Menudo problema! De ahora en adelante la Guardia Civil deberá estar más atenta a las etiquetas de las mantas de cuadros de los pastores de ovejas que a los reglamentos de vías pecuarias, la ley de Montes, o los controles sobre las servidumbres de saca de agua y abrevadero. Lo importante es que los zurrones sean de Ubrique, que chalecos y calzones se hayan fabricado en Sabadell, que los calzoncillos sean de la marca “Cañamares”, que los zapatos procedan de Elche y que las mantas vengan de Palencia. Sobre el bastón, o el palo de peregrino, no hay todavía nada legislado pero se presume que deberán ser de madera de castaño, o de fresno, curvados, de una sola pieza y de procedencia nacional. Las varas de avellano se recogerán en octubre, una vez hayan perdido la savia y siempre en cuarto menguante (si no es así, no tienen la flexibilidad debida y se pudren con rapidez) y sólo se utilizarán para cantar villancicos navideños al estilo de cómo lo hace Miguel Ángel Revilla en Cantabria, para sacudir estopa a los mozos desmadrados durante los encierros de San Fermín, o para labores de colchonero. Todos deberán ser de procedencia nacional y extraídos de cañadas reales. A aquellos pastores que vistiesen trajes de pastorcillo, zurrones y bastones de procedencia china se les pondrá en manos de SGAE para que la ministra González-Sinde les aplique la “Ley Sinde” sobre pastoreo y tráfico de cedés piratas con el máximo rigor por los más altos y severos organismos.

viernes, 24 de diciembre de 2010

El villancico de Revilla

Ahora que se nos ha muerto Labordeta y que los aragoneses desean cambiar el rimbombante himno de Aragón por aquello otro de “Habrá un día en que todos, al levantar la vista…etcétera”, nos aparece otro nuevo cantautor, Miguel Ángel Revilla, dispuesto a hacer himno oficial de Cantabria eso de “Con albarcas vienen…con albarcas van”, como ya nos ha demostrado a todos los españoles con su videoblog personal. Miguel Ángel Revilla lo mismo sirve para un roto que para un descosido. En vista de que ni con las cajas de bocartes que envía en taxi a La Moncloa consigue que Zetapé le haga el AVE Madrid-Santander, se ha puesto los zuecos de madera, se ha apoyado en una vara de avellano y acompañado por Benito Díaz, que es como el Manolico el Corto de Cantabria, se ha echado al monte para demostrarnos que la Navidad ha llegado y que cantar aunque sea desde Carmona, como decía el padre Laburu, equivale a rezar dos veces. Ahora sólo falta que hable con la ministra González-Sinde para que le reconozca los derechos de autor, aunque se trate de un tema tradicional con más años encima que el caballo de Espartero. Ya saben, se comienza cantando villancicos y pasando la gorra y se termina haciendo de telonero para los conciertos en directo de La Cabra Mecánica, o los mítines en directo de la Liebre Eléctrica. Todo se andará, si la vara de avellano no se rompe.

martes, 21 de diciembre de 2010

Añoranzas y fastidio

Al referirse a la Navidad, Rosa Montero señala en El País: “Por un lado, se incrementa la añoranza de los que ya no están; por otro, los que sí que están pueden ser un fastidio, como esos familiares a los que durante el año nunca ves, porque no los soportas, y cuya agresividad ahora tienes que aguantar en largos banquetes”. Estoy de acuerdo con su manera de pensar. Las cenas de Nochebuena en familia resultan agobiantes para quienes, como a mí me sucede, preferimos la tranquilidad de un trozo de tortilla de patata, un vasito de vino, a ser posible “Julián Chivite” de crianza, y algo de fruta. Y más tarde un poco de televisión y a dormir, lo más tarde a las once y media de la noche. A Rosa Montero me parece que le sucede algo parecido. No es de recibo tener que “pasarlo bien” por una simple razón de calendario, o sea, el día que toca. No digamos nada si tras una pesadísima cena, a esos parientes insoportables les da por querer jugar al guiñote con tal de no irse a casa y con la excusa de que “es pronto todavía”. Dan las dos de la madrugada, los ojos se me cierran de sueño y ellos, esos seres insufribles, frescos como lechugas, continúan como en el “Cara al sol”, impasible el ademán. Recuerdas “La Nochebuena de 1836”, de Mariano José de Larra: “El número 24 me es fatal…etcétera”. Ya no sabes qué hacer, si ir a dormir y dejar a todos ellos con el libro de las 40 hojas sobre el tapete verde, o ponerte a escribir en el ordenador un artículo de costumbres. Es lo que tienen estas fechas.

lunes, 20 de diciembre de 2010

¡Si don Natalio levantara la cabeza...!

A José Reyes Fernández, profesor del Instituto “Menéndez Tolosa” de La Línea de la Concepción se le va a caer el pelo por nombrar la cuerda en casa del ahorcado. A mi me consta que los profesores de Secundaria lo están pasando mal por culpa de alumnos maleducados, amenazantes e irrespetuosos contra los que nada serio se puede hacer. Algunos de esos alumnos, grandes como el Coloso de Rodas y con los cerebros de mosquitos, se aprovechan de su minoría de edad, es decir, de no haber alcanzado los 18 años, para poner en jaque a toda la junta directiva de determinados institutos de Bachillerato. Sé que existen profesores con baja médica por depresión, por la impotencia que les produce trabajar en la enseñanza frente a un puñado de insensatos que rompen la clase un día sí y otro también. Lo que desconocía era que un profesor con dos décadas de experiencia podía tener un expediente abierto en su centro de enseñanza por hablar del clima andaluz y de su bonanza para la cura de jamones. Tanto es así que una familia musulmana acaba de denunciar al profesor Reyes en una comisaría de La Línea por, según se desprende de la delación, “cuestionar sus creencias”, o sea, por haber manifestado en clase los beneficios del clima de Trevélez (Granada) para la cura de jamones. La Junta de Andalucía defiende al docente, como no podía ser de otra manera.

Los jamones de Trevélez, muy afamados, formaron parte de la vida cotidiana de alguien que fue ministro de Instrucción Pública durante el periodo de Allendesalazar, en 1919. Me refiero a don Natalio Rivas Santiago, amigo que fuese de mi abuelo materno. En un espléndido trabajo de Jesús Roberto Balboa Garnica, éste relata que don Natalio conocía muy bien a sus paisanos y que en cada pueblo tenía su representante, que le garantizaba los votos para el Congreso. Así, en Albuñol, en Órgiva y Ugíjar (cabezas de partido) disponía de un cacique al que se sometían los votos de su ámbito. En ese sentido, comenta Balboa: “Cuando su oponente político es fuerte, lejos de combatirlo, le da un cargo en el pueblo y asunto zanjado”. “Pero en Madrid –sigue diciendo Balboa—la vida política era de otra manera y don Natalio tenía las llaves de casi todas las residencias políticas de la Villa. Y las llaves no eran otras que los jamones de Trevélez. Era muy habitual que don Natalio contara con una amplia bodega de jamones que regalaba con muy buen criterio y con mejor tino a aquellos que podían serle de alguna utilidad; luego se convertía en algo habitual que esas personas siguieran recibiendo los magníficos jamones de Trevélez. Todo el mundo en Madrid conocía de las excelencias de los perniles de don Natalio y nunca faltaban en su casa de la calle Velázquez, 19, etcétera”. ¡Si don Natalio levantara la cabeza…!

sábado, 18 de diciembre de 2010

Estado de la Indecencia

Manuel Martín Ferrand, al referirse a la afición que tienen nuestros políticos a usar el coche oficial, señala: “Lo del coche oficial, que suele ser tildado de «perejil del loro», no es baladí. Es un síntoma claro de abuso de autoridad. Salvo en actos oficiales de gran ringorrango protocolario, no encuentro más de un centenar de personas en toda la Nación que justifiquen, por su cargo y función, un coche de alto nivel atendido por los conductores suficientes para completar la disponibilidad diaria y sin límites horarios. Todo lo demás es exceso”. Entiendo que tiene razón. En España, con la que está cayendo, el “perejil del loro” es tan habitual como tomar unos churros con el café. En este Estado de la Indecencia todo vale. Pero lo malo, lo peor de todo, es que el ciudadano contempla ese “ringorrango protocolario” como algo normal, de la misma manera que encuentra normal que concejales y familiares de éstos ocupen “por todo el papo” los mejores palcos en los teatros municipales y los lugares privilegiados en estadios o salas de música. Cuando el ciudadano encuentra normal aquello que a todas luces es un tremendo disparate y un abuso irritante, algo empieza a oler a podrido en nuestra sociedad. Lo que sucede es que, acostumbrados a oler lo pútrido, hemos acostumbrado a nuestras narices a esas pestilencias y no nos importa seguir oliéndolas. Es lo que les sucede a los habitantes próximos a una fábrica de papel. Por ejemplo, lo que sucedía en Tolosa hace treinta años. Martín Ferrand, añade en su artículo que “si un concejal no puede viajar en su propio automóvil, esto no necesita reformas. Se requiere una revolución”. Yo también lo considero así.

viernes, 17 de diciembre de 2010

Instituciones deshilachadas

El viejo profesor Timoteo Gavilanes me comentaba ayer que la felicitación navideña de la Casa Real de este año dice poco. En ella aparecen dos niñas, las hijas de los príncipes de Asturias, con mucha camomila en el pelo, sana dentadura y unos retales de cretona tapándoles el cuello. Bueno, pues muy bien. Nada que objetar. Lo que ya no sé es qué opinarán al respecto los receptores de tal felicitación. Timoteo se alegra de que la nueva ortografía sobre tratamientos reales, al ser adjetivos, no necesiten que se escriban con mayúsculas, salvo en la “canela fina” de Anson y en el “Libro de Estilo de ABC” publicado durante la etapa decadente de los Luca de Tena, donde todavía se la cogían con papel de fumar. Los de Vocento continúan con esa práctica de respeto, conocedores del talante de los destinatarios finales de ese diario. El año termina mal, como Pachorras en Pastriz, o como Cagancho en Almagro. Se nos deshilachan las instituciones del Estado con la pertinaz crisis provocada por unos bancos avariciosos y la modorra instalada en la gobernanza, que obliga a que el 20 % de los jóvenes no puedan emanciparse y que Cáritas se encuentre desbordada ante las demandas de ayuda. El asesino de Olot parece que ya se encuentra “más tranquilo” tras haber ajustado cuentas y Carmen Cervera empieza a perder la paciencia respecto a la prórroga de su colección de pinturas cedida al Estado, sabedora de que el 15 de febrero termina la prórroga. González-Sinde, presidenta del Patronato del Museo Thyssen, no sabe, no contesta, lo está pensando… La ministra Chacón continúa sin dar fecha a la salida de las tropas españolas en Afganistán. “Capitán, mande firmes”. Chacón, sumisa como una doncella con cofia, hará lo que le ordenen los Estados Unidos, si hacemos caso a las filtraciones de Wikileaks. Mi viajo amigo Timoteo sabe que los actuales ministros admiten patadas en el culo y encima dan las gracias. Les falta casta.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Bebedores de absenta

Un viejo amigo profesor de Historia me contó tomando café en un cuchitril de medio pelo que Cristóbal Colón, una vez que hubo puesto pie en La Española, pilló a un indio por banda y le recetó un coitus a tergo a la pompeyana magistral. Aunque el profesor comprendiese, y así me lo hizo notar, que no era una forma muy ortodoxa de cristianizar infieles en el nombre de la Corona de Castilla, tampoco dejó de ser una forma de ilustrar al que no sabe, que siempre es una importante obra de misericordia si nos atenemos al pie de la letra con lo que se aclaraba en el “Ripalda”. Sobre la conquista de América se han escrito barbaridades que producen escalofríos. Basta con leer la “Brevísima relación de la destrucción de las Indias”, de Fray Bartolomé de las Casas. Pero, al margen de estas intrínsecas apreciaciones del profesor Timoteo Gavilanes, destaco por si sirve de utilidad que el pedagogo en cuestión abusaba del absenta, del griego ἀψίνθιον, ese anisado que según cuentan produce alucinaciones y que bebían en el barcelonés Bar Marsella, en el Raval, Hemingway, Picasso y Dalí. Timoteo Gavilanes me informó de que “después del primer vaso, uno ve las cosas como le gustaría que fuesen. Después del segundo, uno ve las cosas que no existen. Finalmente, uno acaba viendo las cosas tal y como son, y eso es lo más horrible que puede ocurrir”. De cualquiera de las maneras, este profesor no estaba del todo seguro que la conquista de América hubiese sido como nos la contaron en el bachillerato. Según Timoteo Gavilanes, modificaron el guión y lo adornaron con orlas patrióticas para un mejor entendimiento de los educandos y a mayor gloria de España, madrastra de 22 naciones. ¿Beberá absenta Zetapé? Que alguien de su entorno se lo pregunte. Si la respuesta es afirmativa, muchos españoles entenderemos al fin el motivo de ese sindiós que irradia La Moncloa a la rosa de los vientos.

martes, 14 de diciembre de 2010

Ni se muere ni cenamos

El embajador de Marruecos en España, Ahmadu Uld Suilem, se ha debido perder en su camino hacia Madrid. Digo yo que aprovechará para llegar a España junto a los Reyes Magos en la madrugada del 5 de enero, de sopetón y entre dromedarios, para repartir en la cabalgata caramelos a los niños que hayan sido buenos y sacado excelentes notas en el colegio de curas. Porque el carbón ya no lo proporciona nadie al precio que se ha puesto. Si les digo la verdad, nunca supe la razón de amenazar con castigar a los niños traviesos de mi infancia con briquetas de carbón. Sería por su color negro. Tampoco entendí aquello del “hombre del saco” ni lo del “ratoncito Pérez”. El caso es que los niños de ahora ya no desean recibir juguetes sino juegos para el ordenador. Sus arterias deben tener el color de las angulas de tanto sedentarismo mirando a la pantalla. En mi época de niño, como no había casi de nada, nos distraíamos con cualquier cosa: unas chapas de botellines, unas pistolillas que apañábamos con dos pinzas de tender ropa, o con los juegos reunidos “Jeyper”, que mataron muchas tediosas tardes domingueras de invierno. Al señor embajador de Marruecos, ex dirigente del Frente Polisario, se le concedió el plácet en abril pasado. Y nunca más se supo. Del anterior, Omar Azziman, tampoco se sabe nada desde que tomó las de Villadiego. ¿Se los habrá llevado el hombre del saco? Sí que es raro, sí… El caso es que Moratinos también está desaparecido y la señora Jiménez está muy preocupada por los manantiales de agua que abastecen a la ciudad de Melilla. Se ha agarrado al botijo, como hizo Marcelino Iglesias con el Ebro, y no lo suelta. Teme que corten el suministro. Nunca se sabe. Se empieza por bravuconadas y se termina con otra Marcha Verde. El conflicto de la isla de Perejil lo ganó la presencia naval española y el Segundo Tercio de la Legión de Ceuta, echando de ese lugar al único tipo que permanecía entre los apriscos cuidando unas cabras. Y aún así hubo que concederle el 19 de octubre de 2010 la Gran Cruz de la Orden de Carlos III a Driss Jettou, es decir, al ministro del Interior marroquí y máximo responsable de las fuerzas auxiliares y de los gendarmes que “invadieron” aquel islote. La Gran Cruz fue como el regalo del ratoncito Pérez, o sea, de Zetapé, a un pájaro de cuidado por haberse dejado ganar la guerra del abuelo Cebolleta.

sábado, 11 de diciembre de 2010

La subdelegada es culpable

Delfín Rodríguez, comentarista en El Correo de Zamora, tiene su gracia. Está muy alarmado por la cantidad de robos que se producen en esa provincia ante la aparente indiferencia de la subdelegada del Gobierno. El señor Rodríguez hace referencia a los “ladrones de uña negra”, esos amigos de lo ajeno de poca monta. Según cuenta, “Los que desvalijaron los cepillos y veladoras de la iglesia del barrio de San Isidro, en Benavente, son unos cafres. Rompieron una vidriera para acceder al templo. Con lo fácil que hubiera sido asistir a misa y luego, acabado el oficio, esconderse en un confesionario para realizar la sustracción sin daño alguno. Al día siguiente podían haber confesado, recibir la absolución, salir de la misma forma y aquí paz y en el cielo gloria”. Tiene razón. Lo que no dice don Delfín es que para que les sean perdonados los “pecados” es “conditio sine qua non” devolver lo robado. En otra referencia, don Delfín expone a los lectores el nefando pecado que supone la codicia de los bienes ajenos de una señora en el interior de un supermercado: “Días pasados, en una gran superficie zamorana, sorprendieron a una mujer de buen ver y buen vestir con un cargamento de latas de bonito. No quiero decir que las feas sean más ladronas, sino que iba arreglada como una señora que no pasa penuria alguna. Pues bien, en su descargo alegó que el hambre acuciaba a sus hijos”. Y para redondear su argumentación, don Delfín pone la guinda de color a su pastel literario: “Comprendo a la ladrona, pero tampoco es que fuera una ladrona de estricta necesidad. Si lo hubiera sido, hubiera cogido del estante caballa o sardinas para no resultar onerosa al centro y poder volver a robar otro día con la garantía de que sería bien vista. Pero así, no. Los del centro pensarán que es una ladrona demasiado exquisita como para hacer la vista gorda”. Estoy de acuerdo con don Delfín. Preferir latas de bonito del Norte a latas de caballa de la parte de Marruecos es de gustos refinados, conque el pecado es mucho más mortal y merecedor de mayores penas en el infierno. Se puede ser ladrón, pero no ladrón con gustos refinados y de paladares exquisitos. A menos que el ladrón lo sea de guante blanco, o de “uña blanca”. Entonces la cosa cambia. Queda claro que la subdelegada del Gobierno debe dimitir de inmediato, por el bien de Zamora y por la honra de la estatua de Viriato.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Gobierno cupleteril

Cuenta Hermann Tertsch en su artículo de hoy en ABC, “Gentucismo”, lo siguiente: “En una comida en la sede del ministerio que tan sabiamente dirige, doña Pajín presentó el 17 de noviembre a su nuevo fichaje, compañera de mil fiestas, a un grupo de diputados y senadores. Alguien debió ser tan descortés como para recordarle a Pajín la regla administrativa que no cumple su amiga que, si a alguien pudiera interesar, se llama Nuria Espí de Navas. La respuesta fue contundente. Doña Leire en estado puro: «Sólo faltaría que la ministra no pueda nombrar a quien le salga de los cojones». No cabe duda de que a la ministra Pajín se le ha visto el pelo de la dehesa. Primero: a la ministra de Sanidad, por su condición de mujer, no le puede salir nada de los testículos por razones obvias. Segundo: en la cartera de Sanidad que tiene asignada por decisión de Zetapé existe una Secretaría de Estado de Igualdad conducida por Bibiana Aído. No sé qué le habrá parecido a la ex ministra la actitud machista de su inmediata superior. Tercero: haría falta conocer ahora si la tal Nuria Espí, o sea, la compañera de fiestas de la ministra Pajín, según Tertsch, está capacitada para el puesto político que ésta desea asignarle a dedo, por salirle de las gónadas, mejor dicho, los invictos rusticanos. De cualquier manera, en España se lleva demasiado tiempo colocando a los amiguetes de los políticos en todos los despachos con moqueta. Ya nada sorprende. Y todos esos puestos de libre designación han sido nominados por los cojones de su “padrino”. Pero, en cualquier caso, resulta un poco raro “pretender atar a la vaca por los cojones”, ya que la frase en sí denota desacierto. De la misma manera, que la señora Pajín pretenda asignar un despachito oficial a una amiga de fiestas, si hacemos caso al señor Tertsch, no deja de ser un signo más de la descomposición de este gobierno cupleteril.

lunes, 6 de diciembre de 2010

Se impone la cordura

No me cabe la menor duda de que tal como se ve venir, o tal y como lo pronostica “El País”, en los próximos comicios “va a recibir el PSOE el peor batacazo de su historia”. Para hacer este pronóstico no hace falta ser un lince, sino aplicar el sentido común. Según los últimos sondeos de opinión, “sólo un 42% de quienes le votaron en 2008 estaría dispuesto a hacerlo ahora”. Pero eso no quiere decir que ese “voto a la desesperada” deba ir forzosamente al PP. Cabe la posibilidad de que pueda aumentar el voto en blanco, es decir, ni para Y ni para Z. Sería una “desventura” para la joven democracia española, pero también sería una posición coherente por parte del ciudadano harto. Al PP, no cabe duda, le va a venir muy bien que un PSOE casi descompuesto le resuelva el merengue de las difíciles papeletas sociales que ha tenido que acometer forzado desde el exterior e, incluso, la guinda amarga que aguarda para el próximo 28 de enero. Sin embargo, el ciudadano corriente deberá pensar, antes de acercarse a las urnas en los próximos comicios, en manos de quiénes piensa poner el nuevo Gobierno de España. Votar es, además de un deber ciudadano, un acto de responsabilidad. Los trasvases de votos, en estos momentos de dificultad en la gobernanza, no resuelven por sí solos unos problemas de gran calado donde se exige el consenso de todos los partidos políticos por higiene democrática. Aquí no existe ni la prodigiosa fórmula de Fierabrás ni los milagros de Caná de Galilea para convertir el agua en vino, en este caso, nuestra miseria en riqueza. De momento, a Rajoy se le ha jaleado hoy “¡Presidente! ¡Presidente!” a su llegada al Congreso, y con motivo del día de la Constitución, con el mismo timbre de voz y con la misma rabia en el cuerpo, por los descendientes directos de unos personajillos de la caverna que hace 35 años gritaban a Arias Navarro: “¡Mantequilla! ¡Mantequilla!”. En aquellos años no existía ni teléfono móvil ni el “mob”. Ahora sí. Pero no cabe duda de que se trata de los mismos perros con distinto collar. No me extraña que el presidente del Gobierno no haya descartado una posible prórroga del estado de alarma ante tanto primo de “zumosol” y tanto patriotero salvador campando a sus anchas a pesar de la lluvia.

sábado, 4 de diciembre de 2010

Todo sale mal

Mientras el Gobierno decretaba el estado de alarma por culpa de los controladores aéreos y los militarizaba, cuando en Marruecos se prepara una marcha para la “liberación” de Ceuta y Melilla de imprevisibles consecuencias para nuestro país; cuando en el extranjero se critica la ausencia de Zapatero en la XX Cumbre Iberoamericana celebrada en Mar del Plata. Cuando al Rey se le obligaba a “poner el turbo” y a firmar el Real Decreto-ley 13/2010 de 3 de diciembre desde la Embajada Española en Buenos Aires; cuando los españoles seguimos sonrojados por las revelaciones de WIkiLeaks sobre los indignos comportamientos del Ejecutivo español y de la Fiscalía del Estado respecto al “caso Couso” y a los presos de Guantánamo; cuando no se ha producido reacción alguna por parte del Gobierno de España ante los sombríos sucesos de El Aaiún; cuando Gaspar Zarrías se ha ido de la lengua, insinuando que el PP está detrás de la huelga y el consiguiente caos aéreo; cuando parece que nos hubiera mirado el tuerto, digo, Rajoy, en Lanzarote, tras haberse quedado en tierra como el Capitán Araña, se ha limitado a decir a los periodistas: “no voy a entrar en juicios de valor”. Es decir, para Rajoy aquí no pasa nada. Sigue en Babia, quieto en el sillón y esperando a que se descomponga el cadáver, como los buitres con respecto a la carroña. ¿Los lectores entienden algo? Yo no entiendo nada. Pero, vamos a ver, ¿dónde está Rubalcaba? ¿Y José Blanco? Para Pablo Sebastián, en República.es, “el ocaso de Zapatero nos lleva a un gran desastre nacional que solo tiene arreglo con la salida del poder de este personaje y la urgente convocatoria de elecciones generales. O de lo contrario con una moción interna del PSOE contra Zapatero, al estilo del ‘impechtman’ americano, que fuerce desde el corazón de este partido la salida inmediata de este lamentable personaje del palacio de la Moncloa donde no está en condiciones de permanecer ni un minuto más”. Para Ignacio Camacho, en ABC, “el Gobierno no halla un minuto de respiro, sitiado por un torrente de problemas que va arrollando la vida nacional como un aluvión turbulento. Al presidente le ha abandonado la suerte y está en estado de colapso político. En plena descomposición de poder, no hay hora en que no se encuentre ante un apuro. (…) No sólo sale mal todo lo que puede salir mal, sino incluso lo que prometía acabar bien.” Isaac Rosa, en Público, señala: “El próximo susto que nos espera ya tiene fecha, si es que por el camino no nos cae otro imprevisto: 28 de enero. Ese día el gobierno, pase lo que pase, presentará en Consejo de Ministros la reforma de las pensiones, acortando el plazo para que partidos y agentes sociales acuerden en el Pacto de Toledo su contenido.” Lo dejo aquí. Mejor no seguir dándole leña al mono, que es de goma.

viernes, 3 de diciembre de 2010

En el puré de la noche

Cuenta Juan José Millás que “un ojo abierto a las cuatro de la mañana, observando las sombras del techo, es como un grumo insoluble del día en medio del puré de la noche”. A media España la noche se nos antoja interminable. Cuesta conciliar el sueño. Y cuando parece que nos envuelve un raro sopor y cerramos los ojos, pasa una ambulancia por la calzada con sonido de sirenas y moviendo tabas. Los enfermos empeoran por la noche, cuando se serena el cuerpo y sólo se escucha el sonido de la respiración. La política mal ejercida y las circunstancias económicas adversas constituyen un bebedizo desmoralizante. Vuelven a subir los impuestos sobre el tabaco. Ya ni fumar se va a poder para matar el gusanillo del hambre. La señora Salgado, fina como la hoja de culantrillo y fría como la hoja de un bisturí, se ha propuesto que vivamos todos en la asepsia, pero sin gastar mucha agua del grifo, sin echar por el sumidero mucha espuma de jabón de tajo, sin humos y sin dinero en el bolsillo. Pero la señora Salgado no se atreve, al menos de momento, incrementar las tasas sobre el alcohol, de la misma manera que su jefe, Zetapé, no quiere mentar a la bicha del vecino incómodo. Para la señora Salgado no existe ni la cirrosis hepática ni la tragedia que supone que llegue a casa un marido borracho un día sí y otro también. A la señora Salgado lo que le preocupa es que el ciudadano fume y pueda quemar el tresillo, o socarrar ese tapiz con un ciervo pintado sobre verdes montañas que trajo el padre de familia cuando se licenció, y después de haber servido como cabo furriel en Regulares. En España, donde con los Austrias no se ponía el sol, desde que se hizo europea apenas se hace de día. Las noches resultan demasiado largas y tediosas; y las sombras del techo, más que un grumo insoluble, parecen almas en pena. Ya no quedan deseos ni para el fornicio jacarandoso. Es como si la señora Salgado nos hubiese cercenado las vergüenzas y el tubo de escape de la boca, por donde sacábamos el humo del cigarrillo, en silencio y sin ánimo de molestar.

jueves, 2 de diciembre de 2010

Más medidas de ahorro

Menos mal que el Gobierno, al fin, ha caído en la cuenta de que había que liberar tanto a las pymes como a los autónomos de ese maldito pago obligatorio a las Cámaras de Comercio, esa rémora de finales del siglo XIX que vino a sustituir a las organizaciones gremiales. Cuando el horno no está para bollos ni funciona el aparato de los sindicatos verticales por rama de actividad, o sea, aquella ley franquista de 26 de enero de 1940 sobre Unidad Sindical y bajo el mando de FET y de las JONS, resultaba paradójico que siguiera en activo en 2010 el pago obligatorio a esa especie de “sindicato amarillo” que sólo representa hoy a determinados intereses empresariales. Curiosamente, en tiempos de Suárez se reconvirtió el Sindicato Vertical en la Administración Institucional de Servicios Socioprofesionales (AISS), que ostentó la propiedad o gestión del llamado Patrimonio Sindical Acumulado. Fue una manera de recolocar sin hacer ruido en calidad de “funcionarios bis” a unos tipos hasta entonces encuadrados dentro de la más recalcitrante caverna hasta su definitivo retiro, con la ventaja añadida para aquellos “estómagos agradecidos” de no tener que sufrir el ineludible concurso oposición. Aparecían atomizados en todos los despachos. Los conocí diligenciando licencias de pesca; trapicheando vergonzosamente con las plazas veraniegas de las residencias de “Educación y Descanso”; en mostradores oficiales, para indicar la ventanilla oportuna al despistado ciudadano que necesitaba un certificado, o presentar una diligencia; etcétera. Pues bien, desaparecidos los sindicatos verticales y a punto de irse al garete las obsoletas Cámaras de Comercio por reducir su financiación, el Gobierno debería ahora poner fin a las diputaciones provinciales como ya viene sucediendo en comunidades autónomas uniprovinciales, donde éstas no existen porque sus competencias son asumidas por la propia comunidad autónoma. El Estado, con esa supresión, se ahorraría mucho dinero. Por otro lado, el plan de comarcalización en España (entendidas las comarcas como un municipio de municipios) es otra duplicidad innecesaria y costosísima. Significa crear “metástasis” de despachos y coches oficiales dentro de la actual vertebración autonómica contemplada en la Constitución. También significaría un considerable ahorro público. En suma, parece importante que el Gobierno tome medidas prudentes en tiempos de crisis. Pero, como bien señala Manuel Martín Ferrand hoy en ABC refiriéndose al Gobierno: “sigue sin ofrecer un plan integral, un programa que vaya mucho más allá de lo previsto en la Ley de Presupuestos, con el que buscar soluciones duraderas. (…) El común denominador de las nuevas medidas gubernamentales, con excepción de la que se refiere a la Cámara de Comercio, (…) reside en el aumento de ingresos para el Estado. Incluso con la privatización —la venta— de porciones de algunos aeropuertos y de las loterías, (…) aunque privatizar sin liberalizar al mismo tiempo es vender las joyas de la abuelita”.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Cuidado con los rateros

La funeraria Baumgardner de Los Ángeles no tiene desperdicio. Ahora pretende subastar el próximo 16 de diciembre la caja de pino que contuvo el cadáver de Lee Harben Oswald, presunto asesino de John F. Kennedy, hasta octubre de 1981. Y pone un precio de salida de 1.000 dólares. Como dijo Belmonte: “hay gente pa’tó”. Otro día veremos, no tardando mucho, otra subasta con el revólver de Jack Ruby, un liguero de Marina, la mujer de Oswald, o el traje de la primera comunión de James Files, al parecer el único autor confeso, quién afirmó años más tarde haber dado muerte al trigésimo quinto presidente de Estados Unidos. A este lado del Atlántico a algunos “gorriones de canalera” les preocupa más la filtración de documentos diplomáticos de Wikileaks. Para Aznar son “unos cotilleos”. Para mí se trata de cierta información, de la mucha que existe, comprada por determinados periódicos. De investigación periodística, nada. Pero sí, seguro que son unos simples “cotilleos”, ya que los mensajes serios suelen ir cifrados. Sin embargo, esos datos conocidos están poniendo muy nerviosos a De la Vega, al Fiscal General del Estado, a Moratinos, a ciertos jueces y, como dicen los cursis, a un largo etcétera. De momento España no está en condiciones de pujar por el ataúd de Oswald, salvo que al descuido, la ministra de Economía le “chorice” la cartera al primer jubilado que haya cobrado la pensión en el banco y se pare en un escaparate de la Gran Vía. No en la “Gran Vía” de la zarzuela de Chueca y Valverde, donde se canta eso de “soy el rata primero, y yo el segundo, y yo el tercero…”, sino en la flamante y centenaria Gran Vía madrileña, la embellecida por Gallardón. Ya se dice por la Citi que “España pronto será insolvente”. Conque, ¡ojo a la cartera!

lunes, 29 de noviembre de 2010

El día después

El PSOE está hecho polvo por su estrepitosa catástrofe en Cataluña, entremés de lo que puede venir dentro de año y poco; el Ibex 35 pierde un 9 % en una semana; la prima de riesgo “está como nunca”, como se canturreaba en el viejo anuncio de “Fundador”, pero en este caso por su dramática situación, ya que ha alcanzado los 270 puntos básicos con respecto a Alemania; y, por último, me entero de que la friki Carmen de Mairena (antes Miguel Brau Gou), que se había presentado como segundo candidato por el partido Coordinadora Reusenca Independent (CORI), se situó como la formación número 14, con 6.982 papeletas, una cifra bastante superior a la obtenida por el partido de Rosa Díez (5.293 votos), y muy alejada de la de Alternativa de Govern, de Montserrat Nebrera, que sólo obtuvo 2.187 votos. Ambas formaciones quedaron también por detrás del Partido Antitaurino y de los Piratas de Cataluña. Menos mal que no se presentó Belén Esteban o alguna otra señora de las habituales en “Sálvame Deluxe”. Seguro que hubiesen arrasado. Los catalanes, sin duda, estaban hasta el gorro del inoperante Tripartito. Al pobre Miquel Iceta, portavoz del PSC, lo confundieron con el Cipotegato turiasonense y le estamparon un huevo en medio de la frente. Mariano Rajoy ya se ve más cerca de la Moncloa sin haber meneado un dedo. Su secreto para el triunfo consiste en no moverse. Quedarse impávido, como el espantapájaros de un páramo castellano. Lo dice Manuel Martín Ferrand: “Cuando la crisis es económica el electorado se inclina hacia la derecha”. No falla. Y aquí lo llevamos crudo.

domingo, 28 de noviembre de 2010

De Don Tancredo al Cipotegato

En vista de que el Gobierno no tiene un plan claro para que podamos salir del agujero negro de la crisis, la delegación de la Diócesis de Teruel y Albarracín de Cáritas aprobó ayer en asamblea un nuevo Plan Estratégico que pondrá en marcha entre 2011 y 2013, bajo el lema ‘Los últimos y no atendidos’. Luego dicen que Teruel no existe. La reunión de los 37 empresarios en La Moncloa, esa especie de “comité de sabios” en su propio interés, ha sido como un “concilio vaticano” en el que, en vez de purpurados, se encontraban los verdaderos dueños de España. Lo que ya ignoro es si los tiempos de opinión se hicieron por turnos, es decir, en función del último volumen de facturación declarado por cada una de sus respectivas compañías. Zetapé, como Don Tancredo, fue recibiendo los gañafones de esa treintena larga de “pablorromeros” subido en un pedestal en medio de la arena del redondel todito vestido de blanco. Allí lo único rojo que había presente era la corbata y los tirantes de Emilio Botín. El resto de invitados tenían caras de acelga. Esos 37 empresarios, que no parecían estar dispuestos a perder el tiempo escuchando las acostumbradas frases-papilla y los disparatados brindis al sol de Zetapé, ese charlatán del crecepelo milagroso, llevaban las ideas claras en sus frías cabezas: el compromiso de cumplir y acelerar la reforma laboral, la de las pensiones, las políticas de contención del gasto y la reestructuración del sistema financiero. De momento, Zetapé ha hecho el papel de Don Tancredo, que a fin de cuentas es un personaje simpático para el público que asiste al burdo espectáculo desde las gradas. Lo malo puede venir más tarde, si ese compromiso se demora, cuando Europa tuerza el morro y saque el diente de jabalí. Entonces, el Don Tancredo de hoy puede convertirse en el Cipotegato de mañana, ese protagonista jocoso vestido de arlequín que tan bien conocen los turiasonenses, al que ponen como a un cristo a tomatazos.

sábado, 27 de noviembre de 2010

Esperpento

El esperpento valleinclanesco en España ya es algo tan común como el botijo, la boina o las mantecadas de Astorga. El sentido de la propiedad, por otro lado, está tan arraigado entre nosotros que no conozco país alguno que detente tantas viviendas de propiedad privada como chabolas en vertical ni tantos apartamentos de verano llenos de brechas en sus paredes maestras por culpa del fibrocemento. Aquí no importa la calidad del paño, sino el saberse dueño de algo, aunque sea de una corraliza en medio de un frío páramo de la Castilla profunda, de un nicho de camposanto resguardado de los vientos y al que da la sombra en verano, o de un desvencijado utilitario con más kilómetros encima que el caballo del Cid. Por estos pagos, vivir de alquiler, o de realquiler con derecho a cocina, fue cosa de patios de vecindad en las películas de Berlanga y de la blanquinegra posguerra con olor a coliflor, a cigarro “farias” con orla de papel de fumar, a don sin din, a sacristía, a naftalina y a caries de porteras. Y ese arraigado sentido de la posesión nos lleva, en algunos casos, a colocar en situaciones embarazosas a notarios y registradores de la Propiedad. Tal es el caso de Ángeles Durán, vecina de Vigo, que tiene en su poder un acta notarial que la hace propietaria del Sol, "al no conocerse en 5.000 millones de años propietario alguno". Al menos, así lo cuenta “La Voz de Galicia”, donde también se informa de que un joven, Víctor Valderrábano, estuvo a punto de perder un testículo al golpearse con la tapa de una alcantarilla mal colocada. Eso es peor. Cualquier español puede perder, llegado el caso, todas o alguna de sus propiedades por embargo hipotecario y el posterior lanzamiento judicial. Pero no está dispuesto a que le toquen los cataplines. Menos aún, a que los pueda perder en mor del puñetero Plan E, de Economía Sostenible.

viernes, 26 de noviembre de 2010

Martínez, punto y coma

Benedicto XVI venía a decir hace unos días que el uso del condón estaba “justificado” sólo en algunos casos. Esas “singulares circunstancias” son, por ejemplo, y cito textualmente: “cuando una prostituta utiliza un preservativo y este puede constituir el primer paso hacia una moralización, un primer acto de responsabilidad para desarrollar otra vez la conciencia de que no todo está permitido y de que no se puede hacer todo lo que se quiera". Pero hoy mismo, el portavoz de la Conferencia Episcopal nos ha dejado a todos más inquietos al asegurar que la utilización del preservativo “siempre sucede en un contexto de inmoralidad", es decir, fuera del matrimonio. Está claro que el Sexto Mandamiento de la Ley de Dios tiene a este hombre bastante obsesionado. Yo le preguntaría: “Oiga, ¿y usted porqué diablos se tiñe el pelo?” ¿A qué viene tal acto de coquetería más propio de un don Juan arrabalero que de un obispo? A Martínez Camino esas cosas de la inmoralidad reinante en España le llevan por la calle de la amargura. Por lo visto, los casos de pederastia dentro del seno de la Iglesia, como las aberraciones de Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo, son cuestiones menores que conviene “tapar” para que se vayan olvidando. Parece ser que la “inmoralidad” de utilizar el condón es un pecado propio de inicuos, esos seres despreciables sin redención posible. Para Martínez, punto y coma, que cuando habla sólo utiliza letras bastardillas, los consejos de la OMS sobre los medios necesarios para atajar el sida, entre los que se contempla del uso del preservativo, son una absoluta estupidez. Claro, ya sabemos que falla en África su “puesta de largo” porque los desgarran con sus largas y ponzoñosas uñas los padres de los negritos del Domund. Esos que salían, no sé ahora, en las etiquetas del “colacao” con sacos pesadísimos al hombro. ¡Qué pena de obispo! ¡Con lo bien que podría haberse ganado la vida de presentador de espectáculos de variedades!

jueves, 25 de noviembre de 2010

Un recuerdo para Santiago Lorén

Esta pasada madrugada falleció en Zaragoza Santiago Lorén. Ganador de la segunda edición de Premio Planeta con su novela “Una casa con goteras” en 1953. Lorén solía decir a los periodistas que le hacían entrevistas en su época de ginecólogo en Calatayud: “me compré una máquina para la consulta y como me di cuenta que era demasiado grande para hacer recetas, le metí unos folios y salió un libro”. Por los “Cuadernos del Ateneo”, de Zaragoza, en los que se le dedicó un monográfico en edición al cuidado de mi gran amigo, también fallecido, José Luis Aranguren Egozcue, Lorén se explaya, recuerda su vieja “Hispano Olivetti” y el tesón que puso en sacar su primer trabajo literario, “Cuerpos, almas y todo eso”, que no era otra cosa que una parodia de “Cuerpos y almas” de Maxence Van der Meersch. Aquella primera novela no resultó fácil de publicar. “Un día –cuenta Lorén—para mi desesperación me devolvió (refiriéndose a Janés) el foliado original en el que la censura de aquellos tiempos (se refiere a 1951 y la censura férrea ejercida por Arias Salgado, ministro de Información) se había ensañado con cruel animosidad. (…) No me rendí, sin embargo, y hablando con el que era entonces alcalde de Calatayud y procurador en Cortes, me dio una tarjeta de recomendación para un secretario del Ministerio que me permitió introducirme en la covachuela de la censura de la calle Génova…, etcétera”. En resumidas cuentas, tras las pertinentes tachaduras en rojo pudo publicarla medio año más tarde. Lorén señala: “No pasó nada. Quiero decir que no pasó nada en el panorama literario nacional, porque una tirada de tres mil ejemplares distribuidos entre todas las librerías españolas, fueron como una gota de agua en un mar de letra impresa. Sí que pasó, en cambio, en Calatayud. Se enfadó todo el mundo, por no gustarles a unos y por no haber nombrado a otros.” Luego vendría el “Planeta”, “El verdugo cuidadoso”, “Las cuatro vidas del doctor Cucalón”, “Vivos y muertos”, “Diálogos en la enfermería”, “La vieja del molino de aceite”, “Hospital de guerra”, “Memoria parcial”, “Ramón y Cajal”, etcétera. Lorén, hijo de un repostero, había nacido en 1918 en el Belchite viejo, el Belchite destruido por la guerra civil. Fue amigo de mi padre. Ambos coincidieron de médicos en tierras del Jalón durante los años 50. Descanse en paz Santiago Lorén, médico, escritor y, sobre todo, buena persona.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

¡A la mierda!

El próximo sábado se reunirá Zapatero con la “selección” de empresarios que manejan los hilos de las treinta grandes firmas españolas, o sea, los que “recurrieron” mediante un informe al Rey por desesperación: Acciona, ACS-Dragados, Anfac, Banco Santader, Banco Popular, BBVA, Caja Madrid, Cepsa, Corte Inglés, Ebro, Endesa, FCC, Gamesa, Gas Natural, Grifols, Ferrovial, Cooperativa Mondragón, Iberdrola, Iberia, Inditex, Indra, La Caixa, Mafre, Mercadona, OHL, Repsol, Sacir-Vallehermoso, Sol Meliá, Telecinco y Telefónica. Parece claro que los empresarios pedirán profundos cambios en detrimento de la clase trabajadora que, sin comerlo ni beberlo, deberá pagar los platos rotos de la expansión artificial del crédito y del hecho evidente de que los empresarios invirtieron donde no debían. Aquí ya nadie parece acordarse de Martinsa-Fadesa, con un pasivo de 4.000 millones de euros. Tampoco, de los 470.000 millones de euros que le adeuda el ladrillo a las cajas de ahorros, de los que 90.000 corresponden a suelo. Aguirre Newman cifra el stock en 1,5 millones de viviendas, 612.512 de recién terminadas; 384.050 en construcción y 520.330 usadas, en venta o alquiler, cinco veces más de lo demandado; ni de la mala gestión de la Caja Castilla-La Mancha, intervenida por el Banco de España en 2009. En suma, el crash financiero de avariciosos y malos gestores; la intervención directa de políticos desaprensivos metidos en todas las salsas (me refiero a las intervenciones políticas directas en cajas de ahorros); y el gasto descontrolado en las Comunidades Autónomas y en los Municipios, constituyen todo ello en su conjunto la causa principal de que casi 5 millones de desempleados españoles se encuentren en una situación de angustia permanente y, en demasiados casos, de pobreza sangrante. A estas alturas de desgobierno, cuando no sabemos muy bien para qué ha servido el ICO; cuánto dinero se ha entregado a la Banca de forma secreta para darle el “oxígeno” necesario por sus evidentes desatinos; sabedores de que estamos pendientes de la multa solicitada por Bruselas ante el Tribunal de Luxemburgo por haber incumplido una sentencia de 2006 (que obligaba a recuperar las ayudas estatales ilegales otorgadas a empresas del País Vasco), etcétera; a estas alturas de desgobierno, digo, a la ciudadanía le da igual que Zapatero se reúna ahora con aquellos que manejan los hilos de las grandes firmas, con los sindicatos, con la Patronal, o con el Papa de Roma. Lo que no falla es el dicho castellano de que la cuerda siempre se rompe por el lado más flojo. Como dijo Labordeta en la tribuna del Congreso: “¡Váyanse a la mierda!”.

martes, 23 de noviembre de 2010

Días de nervios

Ardo en deseos de poder leer “Los días de gloria”, de Mario Conde. Va a levantar chispas del suelo de La Zarzuela. Ahora, cuando los inversores toman las de Villadiego, cuando la Bolsa se hunde, cuando al Tesoro le está costando el doble colocar sus letras a tres y seis meses, aparece este señor de la gomina con un libro en la mano, no sé si el nuevo Apocalipsis, o con un recuerdo a navegantes con Mateo 16:27, para avisarnos a todos, políticos, empresarios y ciudadanos de a pie eso de las Siete Plagas, lo mismo que cuenta en “El gato al agua”, o sea, que JP Morgan, el socio de Banesto que pudo haber sido y no fue, ahora pone en duda la supervivencia del euro. El caso es encender la mecha del desasosiego y taparse los oídos cuando suene el estampido. Dicen que una ola de frío congelará España a partir de mañana. La ola de frío y la otra ola, la de los empresarios que “recurren” al Rey por desesperación, como afirma Rosa Díez. De momento, el FMI ya recomienda a Irlanda reducir el subsidio de paro y bajar el salario mínimo. Cuando las barbas de tu vecino veas pelar… Algunos políticos españoles ya no se la encuentran cuando quieren ir al cuarto de baño. Y ahora discuten a tiros las dos Coreas. Y el domingo la vista puesta en Cataluña. En fin, voy a encender la tele por ver qué se cuenta de Belén Esteban que, al parecer, es el único camino de salvación.

lunes, 22 de noviembre de 2010

No hay excusa que valga

Félix Sanz Roldán, máximo responsable del CNI con motivo de la inauguración del II Congreso de Inteligencia, organizado por las universidades madrileñas Rey Juan Carlos y Carlos III, ha dejado claro que “la misión de los servicios de inteligencia es cada día más difícil”. A mi entender, para eso están, para resolver misiones peliagudas. Si tales escenarios embarazosos los supiese resolver un fontanero, o un protésico dental, aquí sobraría el CNI y hasta el superagente 86. Sanz Roldán entiende que “la dificultad estriba en las nuevas situaciones a las que se ven abocados, tales como el terrorismo, el tráfico de seres humanos, el crimen organizado o el blanqueo de capitales”. Félix San Rodríguez debería saber, y creo que lo sabe, que todos los Estados cuentan con un servicio de inteligencia eficaz y que todos ellos, en consecuencia, se desenvuelven dentro de la legalidad y con los medios necesarios que se les proporciona. España no es ni debe de ser diferente. Lo que desde mi punto de vista no es admisible es que este alto funcionario señale que "algunos riesgos y amenazas se nos vienen encima y nos cogen casi sin experiencia y sin capacidad de reacción". ¿Se refiere acaso Sanz Roldán a situaciones como las sufridas en Madrid la mañana del 11 de marzo de 2004? ¿Se refiere Sanz al terrorismo islamista? El hecho de que Sanz Roldán comente en el Congreso de Inteligencia que “algunos riesgos están fuera de control” es como para que el ciudadano se ponga a temblar. Como si un cirujano operase con el “Pons” sobre una mesa anexa al quirófano, para que la consulta de ese “tocho” le pudiese resolver aquellas posibles dudas que se presentaran durante la intervención. Desde luego que a mí tal “matasanos” no me operaría ni de un juanete. La obligación del Centro Nacional de Inteligencia es, a mi entender, tenerlo todo controlado. Las fisuras, cuando afectan a nuestra seguridad, además de producir pánico en la ciudadanía, regala ideas al contrario. Por lo tanto, Sanz Roldán tiene dos opciones: enterarse de lo que desconoce y tiene obligación de conocer; o dimitir de inmediato por su evidente falta de competencia. Los españoles, con nuestros abultados impuestos, mantenemos la Casa Real, el Gobierno, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el Ejército y el kilométrico rabo de funcionarios de los más variopintos cuerpos y escalas de la Administración Central, de las Comunidades Autónomas, de los municipios y de las provincias. Como ciudadano que tarifa al Estado más de lo que recibe de éste, no admito eso de que “algunos riesgos y amenazas nos cojan casi sin experiencia y sin capacidad de reacción”. Eso sólo lo puede decir un niño cuando no está protegido por su primo el de “zumosol”. Si alguno de esos más de 2.500.000 funcionarios existentes en España no sirve para el cargo encomendado, que se haga a un lado y deje paso al siguiente aunque sólo sea por aseo democrático.

sábado, 20 de noviembre de 2010

Zapatero, capitán Araña

Nuestro territorio cada día que pasa es más reducido. Con Franco perdimos Tánger, Marruecos, Ifni, Guinea, Fernando Poo, Corisco, Annobón, Elobey grande, Elobey chico y el Sahara. Ya veremos qué sucede con Ceuta y Melilla si Marruecos se empecina en lanzarse a campo abierto con otra “Marcha Verde”. Zapatero ha pedido en la cumbre de la OTAN en Lisboa que ésta se implique más en el Mediterráneo. Pero todos han mirado para otro lado. El presidente del Gobierno parece el alumno distinguido del sátrapa rey de Marruecos, ese que dice llamarse “hermano” del rey de España. Observa cómo Marruecos impide la entrada en El Aaiún de los enviados de 'El País,' Tomás Bárbulo, y de 'El Mundo', Ana Romero y Alberto Cuellar con el más absoluto desdén. Por otro lado, Mariano Rajoy permanece impertérrito, apoltronado en un sillón fumando puros. ¿Y qué hace mientras la ministra de Exteriores? Pedir a Hillary Clinton una mayor implicación de los Estados Unidos, o proponer que se envíen a ese desierto africano “cascos azules”. Por lo que se desprende, aún o se ha enterado Trinidad Jiménez de que la CIA fue la organizadora de aquella “Marcha” de mujeres, niños y tropas marroquíes trufadas en el asalto al Sahara de 1975. Aquí todo el mundo parece ningunear al Frente Polisario. Siempre los grandes conflictos han comenzado por pequeñas escaramuzas. Ya veremos…

jueves, 18 de noviembre de 2010

Cuelgamuros y todo eso

No sé, creo que la mejor solución no es volar por los aires la cruz de Cuelgamuros. A fin de cuentas a nadie importa demasiado una cruz de más o de menos en España. El Foro por la Memoria de la Comunidad de Madrid y el Foro Social de la Sierra de Guadarrama así lo desean y respeto profundamente esas pretensiones. Lo que sucede es que con el Valle de los Caídos pasa como con los bocadillos: lo importante es lo dentro. A la caverna le haría mucho más “daño” que se exhumaran los restos de Franco y de José Antonio, que se los entregasen a sus familiares y que ellos decidieran qué hacer con sus respectivos despojos. La basílica, ya sin frailes benedictinos y sin los restos de ese par de fascistas, se convertiría en un simple camposanto con restos de soldados muertos en combate durante la última contienda. Dentro de lo malo, mejor es que los caídos de uno y otro bando permanezcan en ese lugar antes de que continúen olvidados en las cunetas. A la postre, todos fueron soldados españoles llamados a filas y casi siempre sin poder de elección. Las guerras civiles, como bien dijo De Gaulle, no se terminan nunca. Pero a Franco y al Ausente habría que separarlos del resto de inmediato como a esas manzanas medio podridas existentes dentro de un frutero. No puede ser que permanezcan uno delante y otro detrás del altar mayor conociendo sus responsabilidades en la mayor tragedia histórica de España. No se cerrarán las heridas abiertas mientras acudan cada 20 de noviembre unos nostálgicos de la caverna a ponerles flores, a ondear banderas inconstitucionales con olor a alcanfor y a cantar unos himnos más rancios que el fajín de Mola. Lo peor de todo es que muchos chavales de pelo rapado y botas paramilitares que acuden a esos obsoletos actos no saben nada ni de historia ni de lo que representaron ese par de insensatos. Acuden por inercia y mezclan cruces gamadas con tatuajes raros y pelos cortos con chupas de cuero llenas de chapas de "rottweilers" que no vienen a cuento. Les sucede, más o menos, como a aquel tipo que me acompañaba una tarde por las calles de Reus. En un momento dado, ambos nos paramos bajo la estatua ecuestre del general Prim. “¿Quién es ese?”, me preguntó mi acompañante. “Es el general Prim-- le contesté--, el héroe de Castillejos”. “¡Ah, claro, el general Prim!”, respondió. Se hizo el silencio. Al poco rompió el mutis para decirme con mucha seguridad: “¡Quién no ha oído hablar del general Prim de Rivera!”. Pues eso.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Una ministra con poco rendibú

Si todos hiciésemos caso a la ministra González-Sinde cuando dijo aquello de “no hagan el papel de opinar los que no son expertos”, nuestros políticos estarían listos. Así, el secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, hubiese hecho bien en callarse sin antes aprenderse en qué año se descolonizó el Sahara por parte de España; la ministra de Asuntos Exteriores, Jiménez, a la que le ha desbordado el tema de Marruecos como un tsunami, debería tomar clases de Moratinos, ese maestro Ciruela de lágrima fácil, antes de defender a capa y espada lo que hasta hace pocas fechas denigraba en manifestaciones callejeras; la ministra Pajín, otra que tal baila, no debería visitar un sanatorio sin antes conocer in situ cómo se “soporta” con el estoicismo necesario ese tiempo indefinido que algunos pacientes ingresados en sórdidos hospitales permanecen en unos pasillos llenos de corrientes y de sábanas sucias; Rodríguez Zapatero, antes de opinar de Economía, debería haber tomado clases del ex ministro Sevilla para no hacer, como ha hecho, el ridículo más espantoso en Europa; etcétera. A la ministra González-Sinde habría que recordarle que Javier Bardem, la vecina del cuarto izquierda, o servidor de ustedes, podemos hacer el papel, como ella dice, de opinar sobre aquello que nos venga en gana, o que nos salga de la parte más ancha y sabrosa del cebollino. Lo que ni Bardem ni la vecina de arriba ni servidor de ustedes nos vamos a creer es que Pérez Rubalcaba se haya quedado con la copla que le ha cantado con rumor de barcarola su homólogo Taïb Cherkaoui. ¿En qué es experta González-Sinde? ¿En hacer discursitos en contra de las descargas gratuitas de archivos? ¿De verdad considera que se pone en peligro la supervivencia del cine español? Por lo que veo, esta ciudadana aún no se ha enterado de que el cine español, del que ella come, está subvencionado con el dinero de todos los españoles por la sencilla razón de que no vende. Escuche, ministra, usted es especie política de muy apagada iniciativa, conque déjese de aleccionar a nadie. Infunde poco rendibú en el cine, en la política y en su rara manera de entender la cultura.

martes, 16 de noviembre de 2010

El laboratorio de Caldera

Jesús Caldera tiene un laboratorio de ideas, la Fundación Ideas, que es como el laboratorio del mago don Pirulo. Este tipo, que siendo ministro de Trabajo sólo se dignaba hablar con su chófer a través de su guardaespaldas; que “arregló” el espinoso asunto de la inmigración en España a base de conceder visados de estancia indefinida hasta al negrito del “colacao”; que un día cambió de peinado y se mandó hacer un caracolillo en la entrada de la calva como el de Estrellita Castro, y al que resulta difícil darle el timo de la estampita, pretende ahora hacer el triple salto mortal sobre el trapecio como si fuese Pinito del Oro, o sea, dando cursos al cincuenta por ciento de los parados para así poderlos sacar de las listas del INEM. Cualquier día de estos saldrá a la calle y doblará cucharillas soplando, hipnotizará basiliscos con la mirada como hacía san Trifón, o recitará aquello de Rafael de León que cantaba Pepe Pinto: “¿Quieres un collar?, ¡de brillantes!”. ¡Qué más da, si el dinero público no es de nadie! Este tipo, aficionado a los ensayos científicos con el “quiminova”, está dispuesto a terminar con las abultadas cifras de desempleo de la forma más expeditiva. Pongamos por caso que a usted le echan del tajo, le sueltan una modesta indemnización y corre a apuntarse a la lista del paro. Pero, una vez allí, en esa siniestra oficina de funcionarios inoperantes, aparece un señor de bigote y le dice aquello de “échale guindas al pavo, que yo le echaré a la pava”. Usted se mosquea. No termina de entender el sarcasmo de ese desconocido. Pero el tipo del bigote y con cara de saberse de carrerilla los obsoleto Fueros del Trabajo le espeta: “Ha tenido suerte, caballero, existe un curso de escaparatista que es la rehostia y tiene que apuntarse”. El recién parado, que no sabe ni por dónde le sopla el aire, intenta poner inconvenientes: “Pero, escuche, ¡es que yo soy veterinario!”. El tipo del bigote, que a primera vista parece respetuoso con la ley y el orden, pero que más tarde resulta ser especie de culo pajarero e inclinado a soplar el bombardino en las fiestas patronales, le corta tajante: “No importa. El saber no ocupa lugar. Mire, o se apunta de inmediato al curso, o le saco de la lista”. Y usted, resignado, se apunta al curso de escaparatista y, además de ello, le sacan de la lista. Se acaba de obrar el milagro. Desde ese día ya no está usted en el paro. Se acaba de convertir en «desempleado-trabajador».

domingo, 14 de noviembre de 2010

La "Marcha Azul"

La marcha kilométrica avanzaba a paso rápido por la carretera de La Coruña. “Debe tratarse de una nueva Marcha Verde”, comentaban unos pastores que veían asombrados la escena desde un otero. Un turista, armado de una rudimentaria cámara de fuelle, apeaba su viejo cacharro en una cuneta seguramente llena de esqueletos e intentaba plasmar el instante. Era lo más parecido a aquel soñador de Monte Palomar que dijo haber fotografiado la modesta tapadera de un congelador de botellas, la famosa tapadera de Adamski, fallecido el 23 de abril de 1965 de un ataque al corazón, convencido hasta su muerte de haber fotografiado un platillo volante. No, mejor aún, sería probablemente un jubilado que había salido con su pequeño utilitario a tomar el aire de la sierra de Gredos. Definitivamente no se trataba del rodaje de una película sobre la “Marcha Verde”. Lo de ahora parecía más bien una “Marcha Azul”. Seguía avanzando con paso firme y culebreo de banderas. El turista, algo asustado, recordó una Declaración de Principios, aquella de “En Madrid a 14 de noviembre de 1975, y reunidas las delegaciones que legítimamente representan a los Gobiernos de España, Marruecos y Mauritania, se manifiestan de acuerdo en orden a los siguientes principios, bla,bla,bla…firmado, Carlos Arias, Ahmed Osman, Hamdi Mouknass”. El turista se tomó la pastilla de la tensión que había olvidado tragar en el desayuno y siguió haciendo fotos, ahora a un halcón peregrino que revoloteaba sobre el azul-mahón cielo de Cuelgamuros. El cadáver de Luis García Berlanga continuaba expuesto en la Academia de Cine de Madrid, el suplemento XL Semanal ofrecía su última entrevista, concedida sólo tres días antes, y un agujero en tierra le esperaba en Pozuelo de Alarcón. La edición digital del diario ABC daba esa radiante mañana de domingo una noticia que nos dejaba a todos algo menos inquietos: “Miles de personas han acudido hoy en masa al Valle de los Caídos para asistir a la misa de los benedictinos prohibida por el Gobierno «por seguridad». Tantas se han desplazado hasta El Escorial, que han provocado atascos de unos diez kilómetros y Patrimonio se ha visto obligado a permitir la entrada al valle. Los monjes han contabilizado unos 2.000 vehículos”. Una vez más, el Gobierno había claudicado ante una marcha pedestre, en este caso la “Marcha Azul” de los nostálgicos de la caverna hacia el Valle de los Caídos. De haber vivido hoy García Berlanga, y de haber escrito él este modesto artículo, tal vez hubiese pasado a otro escenario tras un punto y aparte y hubiera comenzado en otro ámbito, en otro tiempo y de otra manera. Por ejemplo, que ya es hablar por no callar, como lo hizo “Cambio 16” un 8 de diciembre de 1975: “A esa hora, un camarero de Perico Chicote, que es el encargado del bar de las Cortes, interrumpía la reunión para servir un café cortado a Antonio María de Oriol y Urquijo, un whisky para Girón, otro whisky con soda para Iñigo Oriol…y patatas fritas, chorizo y tortilla de patata para todos”.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Fariseismo

La entrevista de Millás a Felipe González en El País publicada la semana pasada sigue sirviendo de carnaza a la caverna. Así, como nos recuerda El Plural, “el director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, recupera los GAL para atacar al Gobierno socialista”. En un editorial titulado ‘Una investigación posible y necesaria’, su periódico subraya lo siguiente: “En el Ejecutivo y en el Grupo Parlamentario Socialista se sientan personas que tuvieron que ver tanto con la guerra sucia contra ETA como con la obstrucción de las investigaciones en los últimos años del mandato de González. Lo que no recuerda el texto es que Pedro J. justificaba la guerra sucia contra la banda terrorista a principios de la década de los 80”. Por otro lado, César Alonso de los Ríos, en el diario ABC, bajo el título “La X se defiende”, señala entre otras cosas: “Aquel atormentado ser se ha planteado ahora, y nos lo plantea a todos, la muy espinosa cuestión de saber si tuvo o no valor ético que él como Presidente no llevara el terrorismo institucional hasta el punto de cometer un crimen múltiple en el territorio de otro Estado. Es obvio que González da por supuesto que la opinión pública sabe que él fue la X del GAL”. Por otro lado, Alfonso Rojo, director de “Periodista Digital” y tertuliano profesional, habló en “El Programa de Ana Rosa”, de Telecinco, refiriéndose a las declaraciones de Felipe González, señalando que “tuvo la oportunidad de volar a la cúpula de ETA”. Y añadió: "Estos tíos a los que Felipe González tenía que haber volado y no tuvo lo que hay que tener para volarlos..."; para concluir: "al terrorista y al pichón, perdigón". En resumen, aquel sector de la más rancia derechona que aplaudían con las orejas la “guerra sucia” contra ETA, se constituye ahora, casi treinta años más tarde, en un ramillete de jueces de la horca. Menos mal que existen las hemerotecas para poder poner a cada uno en su sitio.

jueves, 11 de noviembre de 2010

De cine

Ha fallecido el productor de cine Dino de Laurentis. Recuerdo su película “Las noches de Cabiria”, dirigida por de Fellini en 1957, donde Giulietta Masina hacía un papel genial. La prostituta Cabiria Ceccarelli se convirtió en víctima de sucesivos vividores que se aprovecharon de ella. Recuerdo que, siendo un mozalbete, tenía prohibida la entrada al cine de todas aquellas películas que fueran para mayores de 16 años. Por aquellos tiempos en los que imperaba en España el espíritu del “nacional-catolicismo” existía una férrea censura hasta el punto de que, en muchas ocasiones, la ofuscación de aquellos censores llegó a lindar en lo patológico. Todos conocemos el caso de “Mogambo”, la película de 1953 dirigida por John Ford, con Clark Gable, Ava Gardner y Grace Kelly. Aquella censura, tan acostumbrada a cogérsela con papel de fumar, cambió los diálogos para evitar que se produjese adulterio en su argumento, y convirtió a Grace Kelly y a Donald Sinden en hermanos en vez de matrimonio con lo que, por el hecho de acostarse juntos, se producía un evidente quebrantamiento. Pues bien, en aquel pueblo de Zaragoza proyectaban “Las noches de Cabiria” una de aquellas tediosas tardes de domingo. Sobre el mediodía era costumbre colocar en la puerta del cine varios fotogramas ampliados de la película que se proyectaría horas más tarde, así como su clasificación moral. Yo era consciente cada mañana de domingo, en función de aquella subjetiva clasificación, de si podría o no podría pasarme por taquilla para sacar entrada. Aquella tarde iba a ser que no. Pero sucedió algo fuera de lo habitual. El puritano párroco, que años más tarde saldría rana, aconsejó mediante unos avisos que colocó por todas las paredes del pueblo acudir al cine aquella tarde, considerando que Cabiria era una película muy peligrosa para la moral de los feligreses, que si acudían al cine pecarían mortalmente, etcétera. Por la tarde me acerqué por la puerta del cine. Mi sorpresa fue grande cuando el empresario del local me invitó a pasar a la sala de proyección sin pedirme el carné. En las butacas casi no había público. Aquella tarde descubrí una de las mejores películas del cine italiano. Como dijo Franco a la muerte de Carrero: “no hay mal que por bien no venga”.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Niño Becerra

Está claro que lo que tiene que hacer Mariano Rajoy es fichar urgentemente a Santiago Niño Becerra, catedrático de Estructura Económica en la Universidad Ramón Llull, para que lo ponga en el interior de la concha del apuntador cada miércoles, cuando formule las preguntas al Gobierno. Niño Becerra da la imagen de uno de aquellos predicadores del Lejano Oeste que se subía al pescante de un carromato para anunciar a los presentes el próximo fin del mundo. Niño Becerra, escrito así, más se me antoja al nombre de un novillero anunciado en un cartel de provincias dispuesto a abrir la puerta grande de una plaza portátil sin enfermería, que a un pedagogo serio. O, porqué no, a un guitarrista de la escuela de Niño Ricardo, es decir, de Manuel Serrapí Sánchez, acompañando a Manuel Mairena. Lo que pasa es que Niño Becerra tiene cara de enterrador y Niño Ricardo tuvo un gran sentido del humor hasta en los momentos más amargos de su existencia. Se cuenta que cuando le operaron de la garganta los amigos le preguntaban, con más o menos guasa, si era verdad que había “perdido la voz”, a lo que contestaba rápida e incisivamente: "¡Sí, pero me quea la suficiente pa'cagarme en tós tus muertos!". Niño Becerra, apodado como Doctor Catástrofe, no dio ni una en sus predicciones para este año que termina. Ahora ha asegurado en una conferencia en Logroño que “el paro puede llegar en España al 30% de la población activa a finales de 2011 y principios de 2012 y que el producto interior bruto tendrá una caída de entre el 7% y el 8%”.En fin, si me dieran a optar entre Niño Ricardo y Niño Becerra, me quedaría con el primero de ellos. Vale más una vieja grabación en pizarra suya que una conferencia con tintes de “halloween” de ese malaje. Las uñas del Niño Ricardo crecían hacia arriba, por lo que quizás era el responsable en parte del sonido tan peculiar de su toque. Las neuronas del cerebro de Niño Becerra supongo que chisporretearán en el interior de su colodrillo como las bujías de la niña del exorcista.

martes, 9 de noviembre de 2010

Las "verdaderas" causas de la crisis

Nuestra crisis económica tiene arreglo. Así lo ha asegurado Rouco Varela, cardenal arzobispo de Madrid, “siempre que hagamos caso a un nuevo camino de conversión a Dios”. El cardenal estima que las causas más profundas de la situación actual "son de naturaleza moral, espiritual y religiosa". ¡Chupa del frasco! En este sentido, me gustaría recordar al cardenal Rouco que el Estado abonará a la Iglesia Católica en 2011 la cantidad de 160 millones de euros, como avance de la asignación tributaria, a razón de 13’26 millones mensuales. Ya está bien de que el Papa llegue a España para hacer comparaciones entre el laicismo «agresivo» de la España actual con el anticlericalismo de la Segunda República. España es un Estado aconfesional y no podrá nunca ser un Estado laico mientras continúen en vigor los Acuerdos Iglesia-Estado de 1979 firmados por Marcelino Oreja. Pese a todo ello, en España ni se queman conventos ni se asesina a sacerdotes ni se coarta la libertad individual para que cada ciudadano asista a aquellos actos religiosos que crea oportuno si así lo desea. No se puede morder la mano del amo que da de comer. No cabe duda que España sería algo más rica, o se sufrirían con menor rigor otras carencias, como son la sanidad, la educación, o las ayudas a las nuevas tecnologías, sólo por poner algunos ejemplos, si esos 160 millones de euros se destinaran cada año a esas partidas. Soy consciente de la labor magnífica de ayuda al necesitado que ejerce la organización católica de Cáritas. Pero reconozco que también existen otras organizaciones no gubernamentales que no le van a la zaga. Y todas ellas merecen respeto y consideración. Rouco haría bien en intentar salvarse él de sus particulares fantasmas y dejar al resto de los ciudadanos españoles que caminen a su libre albedrío. Lo moral, lo espiritual y lo religioso queda muy bien para ser señalado como norma de conducta a los fieles desde el púlpito, o mediante homilías. Pero, a mi entender, el cardenal Rouco Varela conocería las verdaderas consecuencias de la crisis económica si se molestase en hablar con quienes la sufren en sus carnes. El dolor, que yo sepa, nada tiene que ver con los báculos ni con los capelos ni con los sansirolés que hisopan lluvia dorada desde una nube de algodón.

lunes, 8 de noviembre de 2010

Azaña en la memoria

El pasado día 3 de noviembre se cumplieron 70 años de la muerte de Manuel Azaña; en mi opinión, el hombre más íntegro que tuvo España a caballo de dos siglos. El diario El País le dedicaba un reportaje ayer lunes, “Asalto al presidente Azaña”. La persecución que se hizo tras su muerte a este buen español por parte de Franco no tiene parangón. En ese reportaje se cuenta textualmente: “Pocas semanas después del desasosegante entierro en Mountauban (Francia) del que había sido presidente de la Segunda República -envuelto en una bandera mexicana porque se prohibió la tricolor-, alguien entró en su casa de Pyla-sur-Mer. Ni era caco profesional ni era un cualquiera: se trataba de Enrique Beltrán Manrique, cónsul español en Burdeos. Él mismo desveló su bochornosa misión en un escrito "muy reservado" enviado al ministro Mario de Pinies. "He estado dos mañanas completas con la policía y he mirado todo lo que la casa contiene", escribe Beltrán el 25 de noviembre de 1940. "Obras de arte no hay ninguna; aquello es una verdadera birria, y como él se fue de Pyla cuando todavía estaba esto en poder de las autoridades del Frente Popular no sé lo que haya podido llevarse consigo". ¿Qué esperaban encontrar aquellos miserables? Ciertamente piensa el ladrón que todos son de su condición. Franco rumiaba que Azaña era la encarnación del mal. Y los vencedores de aquel vergonzoso golpe de Estado y lo que llegó más tarde, bendecidos por la misma cúpula de Iglesia Católica que sólo hace un par de días equiparaba, tanto en Santiago de Compostela como en Barcelona, la situación actual de España con la España de la II República, hasta le quitaron el nombre que tuvo siempre a un pueblo de Toledo llamado Azaña para rebautizarlo como Numancia de la Sagra, como si se tratara de uno de esos pueblos de colonización que tanto gustaba al dictador inaugurar. La caverna de este país, ellos sabrán por qué, desea que se pase página a la Ley de la Memoria Histórica. Eso resulta difícil para quienes, a diferencia de los que así piensan, no conservan memoria selectiva. Se acaba de morir Emilio Massera. ¿Pueden olvidar a ese monstruo las madres argentinas que vieron desaparecer a sus hijos durante la dictadura de Videla? Pues no, ni ahora ni nunca. Algo parecido nos ocurre en España a quienes sufrimos la muerte de nuestros parientes a manos de unos malnacidos salvadores patrios. Ni perdonamos ni olvidamos.

domingo, 7 de noviembre de 2010

Anuncios de empleo

En el repaso de la prensa diaria me llama la atención un anunció grande en las “ofertas de empleo”, de esos que cuestan un pastón, donde el Parque Comercial Puerto Venecia, en Zaragoza, “busca un genuino Papá Noel para que desempeñe las tareas de gestión de cartas y entrega de los regalos de navidad entre los niños de Zaragoza”. Entre los requisitos, se exige que sea varón, de una edad media de 50 años, estatura alta, complexión fuerte, voz grave, bonachón y cabello y barba blancos. Además de todo ello, sigue diciendo el anuncio, “se valorará carné para la conducción de carruajes tirados por renos”. Bueno, esto último suena como a cachondeo. En Zaragoza hace mucho frío pero no suele nevar. Los renos y trineos sólo se conciben en cartón-piedra y como reclamo a la entrada de los grandes almacenes, entre esa estúpida musiquilla de “pero mira como beben los peces en el río…” y la bulla de unas madres a las que sólo les queda en el bolso la calderilla de la paga extraordinaria. Es fácil poder encontrar hoy el personaje adecuado para trabajar, aunque sólo sea por unos días, de Papá Noel. Si les digo la verdad, sobra hasta el anuncio. Para encontrar a la persona idónea sólo hace falta acercarse por un barrio a cualquier hora de la mañana. Allí se puede uno topar de inmediato con toda la gama de españoles figurantes de “Los lunes al sol”. Esa gente que ha descubierto que de nada sirve ir a la oficina del INEM, salvo para sellar la cartilla del paro. Ciudadanos de escasas esperanzas en eso que los políticos llaman “planes de futuro”, conscientes de que a su edad, 50 años, sólo “sirven” para hacer de rey mago, de papá Noel, o de cabezudo en las fiestas del Pilar. Y todo ello, suponiendo que se cuente con la recomendación de alguna persona influyente en el ámbito local. Algunos de nosotros, por desgracia, necesitamos que nos insuflen en vena el jodido neón, los estúpidos villancicos, el consumo desenfrenado, el engorde de varios kilos a base de comer turrón, o esas reuniones en familia en las que siempre se termina riñendo por culpa de un cuñado borde, para que nos demos cuenta de que, pese a la tremenda crisis, todavía aparece en la prensa algún anuncio de empleo para gente de 50 años, siempre que se dé el perfil y aunque sólo sea para veinte días.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Las otras familias numerosas

No está mal, ahora resulta que, según una enmienda introducida ayer en el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para el 2011, las familias monoparentales con dos hijos a su cargo serán consideradas familias numerosas a partir del 1 de febrero de 2011. Hombre, podían haberlo aprobado con más retroacción, o sea, antes de tener que subir la terrible cuesta de enero, ese repecho empinado que no lo treparía ni Bahamontes y que deja a la familia más flaca que la hoja de culantrillo. De cualquiera de las maneras encuentro bien la medida. Lo de las familias numerosas ya no se parecen en nada a lo que fueron, con la cartilla de racionamiento echando humo, ese abrigo del niño al que había que darle la vuelta a la tela para que aguantase otro invierno, la madre estirando el puchero de los garbanzos, ya se sabe que donde comen dos comen tres y que donde comen seis, comen nueve; y si queda algo para la cena, mejor. Y aquella foto con toda la camada dentro de un libro de familia para enseñárselo al revisor del tren cuando pidiese los billetes. “Oiga, ¿cuantos años tiene ese niño que salta en el asiento?”, preguntaba el revisor dando por hecho que de ninguna de las maneras se iba a creer en la respuesta del cabeza de familia: “Tres y medio, hará cuatro para el Corpus”. Y siempre la misma contestación del revisor: “Pues está muy crecidito para esa edad”. “Si señor, está lustroso --contestaba el padre--, es el ‘fercobre fólico’, que obra milagros en las criaturas. Les quita el arguillo”. Con el libro de familia numerosa se suprimía el 20 por ciento en el precio del billete a cada uno de los familiares que ya hubieran desarrollado el uso de razón y que el “Astete” aclaraba que era a partir de los siete años. Los más pequeños viajaban de extranjis, como debe ser. Pero los viajeros de aquellos trenes con vagones de madera que se sentaban en mi compartimento, no sé por qué razón, siempre viajaban de extranjis. Cuando llegaba el señor de la visera, le enseñaban un kilométrico color marrón lleno de numeritos extraíbles y se ahorraban los impertinentes interrogatorios. Era como un catón para el gremio de ferroviarios que enseñaba a ver la vida a través de una ventanilla sobre la que ponía “es peligroso asomarse al exterior”, o sea, al otro lado de los Pirineos, donde sólo anidaban rojos y masones. En mi fuero interno siempre pensé que sólo pagábamos billete nosotros, los componentes de nuestra familia, y que el resto del convoy estaba siempre ocupado por ferroviarios que viajaban de “regaliz” y que iban de un lado para el otro por cambiar de aires, para poder trapichear con estraperlo, o para las dos cosas a la vez.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Jugar sin hacer trampas

Para mí que el periodo de pruebas del tranvía zaragozano que unirá Valdespartera con la Plaza de Aragón, con periodistas y fotos en los medios, no sé sí también canapés, no fue otra cosa que una forma de hacerse autopropaganda “por todo el morro” la nueva consejera de la Presidencia del Gobierno de Aragón como aspirante al puesto que dejará Marcelino Iglesias. Aún conociendo que la DGA ha aportado el 10% de esa insensata obra civil, el hecho de que aparezca en primer plano de toda la prensa aragonesa la foto de una sonriente Eva Almunia junto al alcalde Belloch entiendo que es lo más parecido a una descarada y solapada anticipación a la campaña electoral. ¿Quién paga tan repugnante estratagema? Que yo sepa, los zaragozanos. Eva Almunia, hasta hace pocos días secretaria de Estado de Educación y número dos del ministerio que dirige Ángel Gabilondo, falseó presuntamente durante años su currículum académico, haciendo constar que es diplomada en Magisterio cuando, en realidad, jamás acabó esos estudios, según consta en la denuncia presentada en un juzgado de instrucción por supuesta falsedad documental. Eso también lo hizo Roldán, ¿se acuerdan? Pero, además, sobre la nueva consejera de Presidencia, miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE, tanto en la web del Ministerio de Educación como en la del PSOE se ha eliminado cualquier referencia a su formación académica. Todo muy raro. Pero, al margen de sus formación intelectual, que no hace al caso, lo que no debe hacer nunca una aspirante a la Presidencia del Gobierno de Aragón es campaña electoral antes de tiempo aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, o que se pone en pruebas un futuro tranvía municipal. No era, a mi entender, la persona adecuada para representar a la DGA disponiendo, como se dispone, de un consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes. Luisa Fernanda Rudí, la aspirante a la Presidencia e Aragón por el PP, hace mutis por el foro y se ha atrincherado en el fondo de la caverna a la espera de acontecimientos. Igualito que su “maestro” Rajoy. Son como lagartos quietos en el carasol. O como el caimán dentro del agua, enseñando sólo sus ojos saltones. O como Manolete junto a su mozo de espadas cuando, de regreso de América, paseaban silenciosos y taciturnos por la dehesa de Córdoba. Al cabo de varias horas de caminata sin dirigirse la palabra, el mozo le dijo al maestro por ver de romper el hielo: “Que bien se está en silencio, Manolo”, a lo que el torero le respondió: “Mejor se está sin decir ná”. Rudí sabe que las cartas todavía no están sobre el tapete y lo de ahora sólo le parecen fuegos de artificio. Ya lo decía Cela: “el que aguanta, gana”. Conque a esperar unos meses.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Huesos

Hoy, día en el que la Iglesia Católica celebra la festividad de Todos los Santos, los españoles de toda condición visitan los cementerios, depositan flores en las sepulturas de los parientes fallecidos y no sé si en los teatros se seguirá representando el Tenorio, como era tradición. Los pasteleros, que piensan más en hacer caja que en la trascendencia del “ser o no ser” hamletiano de aquellos que duermen en el hoyo, aprovechan para ofrecer a quienes todavía están en el bollo los llamados “huesos de santo”, que no son otra cosa que unos canutillos de mazapán rellenos de crema y espolvoreados con azúcar glaseada. Existe otra variedad de canutillos, llamados “huesos de san Expedito”, que viene a ser la misma pieza pero con otro compás y con más sonido de percusión. En un pueblo de Zaragoza, en Ateca, existió hace ya bastantes años un personaje curioso y muy delgado, a quien todos conocían como Huesitos, no sé si por ser magro de carnes o porque había trabajado en la factoría de los famosos Chocolates Hueso, y que a todos manifestaba sus ferviente deseos de ir a la Luna dentro de un cohete, cuando el viaje a la Luna era sólo un proyecto aunque avanzado de las dos grandes potencias mundiales en plena Guerra Fría. A los españoles siempre les ha encandilado mover los huesos de sus difuntos de un lado para otro. Unas veces para hacer sitio a los que van llegando al nicho; y otras, para sacarlos de las cunetas y llevarlos a lugares más dignos, como debe ser, aunque les moleste a sus verdugos.

domingo, 31 de octubre de 2010

Un chófer para Revilla

Leo en El Diario Montañés que se busca chófer para el coche oficial de Miguel Ángel Revilla. De momento ya hay más de quinientos aspirantes al puesto. Claro, es necesario, entre otras cosas, aprenderse el Estatuto de Autonomía, la Ley de Igualdad, el convenio colectivo para el personal laboral al servicio de la Administración, el Reglamento de Vehículos, la normativa de infracciones y sanciones, las leyes de seguridad vial, el mapa de carreteras de Cantabria, los conceptos básicos de mecánica, de primeros auxilios y de protocolo. Uf… ¡demasiado para Gálvez! Lo que no se indica en las bases es cómo habrá que colocar las anchoas en el maletero para que no huelan demasiado ni se descompongan cada vez que Revilla se acerque a La Moncloa para saludar a Zetapé, o al Ministerio de Fomento, para recordarle a José Blanco eso de “qué hay de lo mío”, referido al trazado del AVE Madrid-Santander sin tener en cuenta esa “Y”, o sea, esos dos ramales, uno a Santander y otro a Bilbao que, según el ministro, supone un ahorro considerable de costes. Revilla tiene mucho interés en recordarle a José Blanco que una cosa es el País Vasco, con todas su prebendas adicionales y bendiciones “monclovitas”; y otra muy distinta Cantabria, donde “nunca esta ni se la espera” a la hora de la toma de decisiones políticas desde Madrid. Para el Gobierno Central no es lo mismo negociar pactos con el “Lehendakari” López, que hacerlo con el “Lindacara” Revilla a efectos de apoyos puntuales en el Congreso de los Diputados. Por esa razón, entre caja de bocartes y chupadas de cigarro habano, siempre que puede le recuerda Revilla al ministro del ramo (que es como se decía en los telediarios en blanco y negro) que para ramales, lo que se dice ramales, ya está en el mapa Ramales de la Victoria, que es la estación de ferrocarril a la que acude en bicicleta el cartero todas las mañanas para recoger la correspondencia de Lanestosa, de Sangrices y de buena parte del Valle de Carranza. Revilla es consciente de que a Santander ya se la “dieron con queso” a principios del siglo XX con aquel trazado del “Santander-Mediterráneo” que, de haberse concluido, habría permitido que los barcos atracasen en Santander y descargasen la mercancía sobre ferrocarril. Éste se habría encargado de transportarla hasta Valencia en cuestión de horas, frente a la semana que tardaba un buque mercante en recorrer la costa. Lo malo es que se quedó en Cidad de Valdeporres-Dosante. Es decir, que por no terminar los 60 y pocos Km. que faltaban hasta Santander, se cerraron los más de 600 Km. de vía férrea hasta Caminreal en 1985. La política es así y el “Lindacara”, que es un lince, lo sabe.

sábado, 30 de octubre de 2010

Sánchez Dragó

Está claro que Fernando Sánchez Dragó lo que pretende es que se hable de él aunque sea para mal. Es su particular manera de utilizar el “truco o trato” para que se le preste atención y para que se compren sus libros. No entraré al trapo sobre todo lo escrito y dicho por este personaje, a veces más parecido a un esperpento de “halloween” que a una persona seria y responsable. El hijo póstumo de Fernando Sánchez Monreal, periodista y redactor-jefe del diario La Voz asesinado por los sublevados en septiembre de 1936, ha tenido una metamorfosis complicada desde su juventud hasta su llegada al punto donde ahora se encuentra, o sea, a ser el autor --según confiesa-- de ciertas “licencias irónicas en el diario El Mundo”. Su “sintonía con el universo filosófico de Oriente” le ha llegado a “ablandar las meninges” y a contar repugnantes historias urdidas con niñas de trece años en Tokio hace muchos años, o a soltar en una entrevista, la que le hizo Juan Cruz en el diario El País el 19 de julio de 2006, que “ahora soy el padre de mi padre, (…) lo llevo aquí, en el hombro, como el papagayo de los piratas, y todos los días charlo un rato con él”. Este moderno Jack O'Lantern sigue siendo un hombre culto, ameno y de pluma ágil. A mi entender, no es necesario que haga excentricidades o que trufe sus relatos con salidas de tono execrables, en determinados casos tipificados en el Código Penal, para que los lectores continúen visitando las estanterías de los grandes almacenes y adquiriendo sus casi siempre magníficos trabajos literarios.

jueves, 28 de octubre de 2010

Cuestión de "share"

Ha quedado claro que los españoles han preferido ver por televisión las hazañas belicosas del pastor lusitano Viriato que el culebrón infumable sobre los príncipes de Asturias. Ditalcón, Audax y Minuro constituyen un trío de traidores que supieron poner la chispa al argumento de esta “historia de la Historia”, como diría Carlos Fisas, fallecido hace pocas fechas. Los príncipes deberán esperar a que se asiente el poso del tiempo si es que se quiere escribir algo de sustancia sobre ellos. Es una lástima que no exista un continuador de la obra de don Natalio Rivas, que lo mismo escribía de Juan Prim, o de Narváez, que de la casa de Tócame Roque; que lo mismo planchaba un huevo que freía una corbata. Su “Anecdotario Histórico Contemporáneo”, publicado en diversos tomos entre los años 40 y 50 del pasado siglo son como una mesa de relojero de anécdotas todas ellas muy interesantes. Y es que la historia sólo interesa cuando se sabe contar. Posiblemente hoy a los telespectadores les interesaría más una biografía novelada de Leandro de Borbón, único hijo vivo, aunque bastardo, de Alfonso XIII y de la actriz teatral Carmen Ruiz Moragas; o los amores de Baldomera, hija de Mariano José de Larra, con Amadeo de Saboya; o la promiscuidad de otra reina española, la “de los tristes destinos”. Para saber cómo se desenvuelven en sociedad los actuales príncipes de Asturias, o las infantas, ya disponen los españoles en los quioscos de la revista “Hola” que, por cierto, a mí no me interesa. En España ya existen demasiados cortesanos de genuflexión fácil, de mucho visón y poco jamón, que darían media vida por salir en una foto aunque sólo fuese junto a Belén Esteban en una hortera playa mediterránea. Viriato tiene fuerza histórica pese al tiempo transcurrido. Respecto a la familia Borbón- Ortiz, paciencia y a recoger, como hace el pescador de truchas con cucharilla. Tiempo le pido al tiempo, que tiempo el tiempo me dará.

miércoles, 27 de octubre de 2010

A ver si nos centramos

Si les digo la verdad, a mí no me parece nada censurable que la infanta Cristina esperase seis minutos a la ministra Pajín. El diario ABC trata la noticia como un acto “lamentable y bochornoso”. Estoy seguro que su tardanza se debería a cuestiones de trabajo. La entrega de premios Imserso “infanta Cristina 2010” no creo que sea cosa de vida o muerte. Otra cuestión distinta, a mi entender, hubiese sido hacer esperar al Jefe del Estado. Pero no hace al caso. Según el protocolo, los invitados deberían estar en la sede del Imserso diez minutos antes. ¿Y eso por qué? De hecho, así lo hicieron Purificación Causapié, directora del Imserso y Engracia Hidalgo, consejera autonómica de Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid. Pues ya vale. Ya tenía la infanta “súbditos” de genuflexión de rodilla que le recibieran a la puerta del coche. La ministra, que me parece que no es partidaria de hacer genuflexiones ni delante del sagrario, acude cuando puede, o cuando le dejan sus obligaciones; que, sin duda alguna, son más importantes y de mayor responsabilidad que los de una de las hijas del Rey. Una cosa es el protocolo, que particularmente no me interesa demasiado, y otra muy distinta el nivel de ocupaciones dentro de la responsabilidad de gobernanza. Es evidente que un Estado puede desenvolverse sin Monarquía y sin culebrones televisivos de marquetin, como de hecho sucede en Francia, Alemania y Portugal, pero de ninguna de las maneras sin tareas cotidianas de gobierno. A ver si ya nos vamos centrando un poco, que ni aquí tenemos a Sissi emperatriz ni está el horno para bollos.

lunes, 25 de octubre de 2010

Garrotazos al aire

Está claro que el PSOE empieza a poner nerviosa a la gente de la derecha. Sólo hay que leer las tremendas declaraciones que en forma de artículo de opinión escribe hoy Agapito Maestre en las páginas de Libertad Digital. Bajo el título “La libertad y el silencio”, Maestre señala que “pocos dudan de que, desde ahora hasta que lleguen las elecciones, asistiremos a espectáculos de propaganda propia de la negra socialdemocracia del Sur de Europa. Nadie, pues, se extrañe si ve entre rejas a algún líder de la oposición”. ¿Acaso tiene alguno de esos líderes de la oposición rabo de paja? Agapito Maestre nos recuerda a los españoles que “no han pasado todavía tres días del nombramiento del nuevo Gobierno y ya han estigmatizado a un alcalde del PP por unas declaraciones ridículas, la gaviota pepera sustituye al aguilucho de Franco y Rajoy es un tipo sin agallas para decir qué quiere hacer con España”. ¿Ustedes se acuerdan de La Codorniz? Pues para mí que Miguel Mihura y Álvaro de Laiglesia eran dos aprendices de humoristas comparados con él. Este hombre, a mi entender digno de estudio, afirmaba en las páginas de ese medio informativo hace poco más de dos años lo siguiente: “ese ateísmo, ese horrible pedrusco en que los socialistas han convertido la idea de Dios, es el gran látigo ideológico de los gobiernos menos democráticos del mundo, entre ellos el español, que lejos de admitir el Estado aconfesional que nuestra Constitución legitima no renuncian a un Estado laicista de carácter ateo”. Este hombre de la caverna, capaz de hacer semejantes aseveraciones al más genuino estilo de Pío Moa, o de Aquilino Polaino, otros que tal bailan, ahora se pone agresivo y arremete por medio del pim pam pum contra todo lo que se mueve: “Para Zapatero y su partido sólo hay un objetivo: desestabilizar a Rajoy y su gente. Cualquier pretexto será bueno para llamarles fascistas, imbéciles y, en fin, basura que no sirve ni como abono para reciclar el suelo de la democracia”. Tiene suerte este irreflexivo ciudadano. A otros, por menos, les practicó Egas Moniz una lobotomía.