Parece ser que el Gobierno no sabe cómo dar salida a un importante número de trenes Talgo-Bombardier, serie 730-Dual, aptos tanto para circular por vía ibérica como para alta velocidad. A alguien de Adif se le ha encendido la bombilla con un peregrino argumento: "Se construye una vía férrea electrificada entre Teruel y Madrid y, a continuación, se da salida a ese obsoleto material ferroviario". ¿Pero, cómo sería el servicio? Parece sencillo aunque no lo es. En Eco de Teruel (6 octubre 2021) tenían la "fórmula de Fierabrás" para semejante proyecto: “Salida por la mañana desde Teruel con destino Zaragoza y desde allí, tras un intercambio de ejes y pasando por la estación de Delicias, continuar el viaje hasta la Estación de Atocha en Madrid por la vía del AVE. El planteamiento incluiría también un viaje de regreso en sentido contrario, para llegar a Teruel desde Madrid esa misma tarde. Así, con un solo tren se lograría dar solución a una reivindicación histórica e irrenunciable de la sociedad turolense recogida en el último Acuerdo de investidura”. Es sabido que Teruel es la única capital de provincia que no tiene vía ferroviaria directa con Madrid y que junto con Soria, carece de trenes de largo recorrido. Las “iniciativas a futuro” siempre son loables, pero en cualquier cabeza cabe que hacer un trazado ferroviario Teruel-Madrid para que circule un ómnibus diario por la “España vaciada” (con ida a Madrid por la mañana y regreso a Teruel por la tarde) parece de locos y el país no está para despilfarros. Cosa diferente sería llevar a cabo una importante mejora en los 305 kilómetros del firme que une ambas capitales por Alcolea del Pinar (Guadalajara) donde se produce la conexión de la N-211 con la A-2, y “donde el pueblo se separa de la carretera vieja que se dirige a Teruel”, según puede leerse en el “Diccionario Geográfico y Estadístico” (1845, tomo I, pp. 454-455), de Pascual Madoz.
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