Antonio Burgos,
en el diario ABC de Sevilla, en su
artículo “Los espontáneos”, recuerda
hoy a aquellos maletillas que alguna vez se tiraron al ruedo en busca de un
minuto de gloria. Ciertamente los ha habido siempre, con poca fortuna. Pero
Burgos, de los espontáneos de la fiesta de los toros ha pasado directamente a
lo que él denomina como “espontáneos de la política”. Cuenta: “En la política
se ha tirado una partida buena de espontáneos para que no toreen ni el PP y ni
el PSOE, que ellos llaman Casta. Por ejemplo, Kichi se tiró de espontáneo en la Plaza (de San Juan de Dios) de Cádiz para que no
toreara La Teo, quedándose él como director de lidia sin
tener conocimientos de tauromaquia política. Una especialista en formar garatas
en los deshaucios, Ada Colau, se
tiró de espontánea en Barcelona para que no toreara Convergencia y ahí la
tienen: alcaldesa. Y que ha reunido ahora a todos los colegas espontáneos que
se han tirado a la política desde los tendidos de sol. Con el clásico aplauso
de sol del PSOE, que los ha hecho alcaldes en muchos casos”. (…) “Tenemos a
Barcelona, a Madrid, a Cádiz, a Pamplona, a Zaragoza, a La Coruña y a Santiago de
Compostela en manos de espontáneos. Grandes ciudades que a los espontáneos les
vienen grandes. Los verían ayer a todos
retratados en ABC, hombro con hombro
con el gachó de Bildu, reunidos en Barcelona por Ada Colau. Contemplando la
foto, me quedé con la duda: ¿es una reunión de alcaldes o una rueda de
reconocimiento policial? De eso tenían pinta algunos”. Vamos a ver: siempre he
sido consciente de que Antonio Burgos no es demócrata. Lo ha demostrado en
cantidad de ocasiones en su “Recuadro”
de ABC. También soy consciente de que
un articulista puede escribir lo que le venga en gana y publicarlo si el
director se lo permite. El pensamiento también es libre; y al que no le guste,
que cambie de página y siga leyendo. Lo que no debería escribir Burgos es que
hay grandes ciudades que a los espontáneos
les vienen grandes. ¡Pero si llevan cuatro días como alcaldes! Lo que no
debería escribir Burgos es que contemplando la foto de ABC con Ada Colau y esos alcaldes “a los que las ciudades les
vienen grandes” no sabe ese columnista si se trataba de una reunión de alcaldes
o de una rueda de reconocimiento policial. Eso me parece gravísimo, de pésimo
gusto y que denota un ramalazo fascistoide más propio de Queipo de Llano en las ondas de Unión
Radio Sevilla que de ese columnista en las páginas de ABC, un diario al que tengo por serio. Bieito Rubido Ramonde, director del diario ABC, y Jaime González,
encargado de área de Opinión, deberían ser conscientes de que existen rayas
rojas éticas, semióticas y lingüísticas que no se deben cruzar. Lo señala el Libro de Estilo de ABC en su página 9.
Antonio Burgos, en mi opinión, ha cruzado todo el arco iris de la indecencia.
Eso, en democracia, no se debe tolerar. Y aquí lo denuncio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario