sábado, 1 de junio de 2019

Que le vaya bonito



El periodista Ramón Pérez-Maura puede discrepar en lo que considere oportuno. La Constitución Española le ampara en su artículo 20 para que exprese libremente lo que desee. Pero hoy, sábado, publica un artículo en el diario ABC, “Con distintas varas de medir”, sobre el que quisiera hacer una precisión. Al referirse a los resultados electorales del pasado domingo, Pérez-Maura señala algo evidente; es decir, que se ha creado un nuevo escenario político donde entran en funcionamiento las coaliciones políticas para poder gobernar en las Instituciones. Al referirse a Ciudadanos, indica que también ese partido está obligado  a “mojarse”. Es ese sentido, Pérez-Maura entiende que Rivera huye de los compromisos, lo que genera un panorama incierto. Dice: “Cuando se conoció el resultado de Andalucía, Ciudadanos dijo que ellos sólo iban a pactar con el PP, no con Vox. La mano izquierda de Teodoro García Egea y Juan Manuel Moreno Bonilla, logró convencer a Vox para que apoyase sin retribución. Vox acababa de llegar a un parlamento y era injustificable que su voto impidiese el cambio tras cuarenta años de socialismo en Andalucía”. Pero ahora llegan sus contradicciones. Pérez-Maura no entiende que en Madrid el partido de Rivera apoye a la derecha para desplazar a Carmena, mientras que en Barcelona Manuel Valls esté dispuesto a dar su apoyo a Ada Colau. Sostiene Pérez-Maura en su artículo algo que sería conveniente matizar por evitar equívocos: “Vox es hoy un partido ampliamente implantado como lo era Podemos hace cuatro años”. Hasta aquí, correcto. Pero afirma a continuación: …y como el anticonstitucional partido de izquierda entonces, hoy [Vox] aspira a tener cuotas de poder”. ¿Podría decirme el sobrino-nieto de Emilio Botín la razón por la que Podemos era inconstitucional?  De haber sido así, como Pérez-Maura afirma, nunca hubiese podido presentarse a unas elecciones en la España democrática. Y remacha su exposición (refiriéndose a Vox): “…con la enorme diferencia respecto a Podemos de que son (sic) un partido plenamente constitucional que aspira a reformar aspectos de la Carta Magna que no comparte, no a quemar la Constitución como desea Podemos”. En fin, visto lo visto no tengo nada más que añadir. En ocasiones vale más una buena ignición que una mala reforma. Que le vaya bonito.

No hay comentarios: