lunes, 3 de abril de 2023

El olivo

 

Ignoraba que en Sevilla existe un olivo llegado desde  Getsemaní, del Monte-Sión, donde cuentan los Evangelios que el Mesías fue traicionado por Judas Iscariote a cambio de 30 monedas de plata. Está plantado en el barrio de Santa Cruz y fue traído por Pablo Noguera, por entonces asistente del cardenal  Carlos Amigo y plantado en el suelo del hotel “Fontecruz Sevilla Seises” (que forma parte del Palacio Arzobispal) donde en su interior existe un pedazo de la calzada romana de Híspalis y un mosaico con motivos marinos recordando que en ese lugar hubo unos baños romanos. Ese establecimiento hotelero es un palacio restaurado del siglo XVI que se encuentra a tan solo 220 metros de la Puerta del Perdón y del Patio de los Naranjos, a 3 minutos a pie de la Catedral, a 10 minutos de la estación de metro “Puerta de Jerez” y a 500 metros del Real Alcázar. Los Seises, no son 6 sino 10 niños cantores que llevan a cabo un baile ante el Santísimo en la Octava del Corpus Christi, en la Octava de la Inmaculada y en el Triduo de Carnaval. Esos niños están a cargo del maestro de capilla de la Catedral y reciben educación y pupilaje en el colegio Portacelli, de los jesuitas. Los Seises lucen traje llamativo con detalles dorados, mallas, pantalones abombados y chaquetillas. En esos días señalados  bailan con sombrero de plumas. También existe un coro de Seises en la Catedral de Granada desde 1520, en la Catedral de Guatemala desde 1796 y desde 1940 en Guadix. Sevilla tiene luz, y golondrinas y aviones y vencejos acharolados y limpios planeando sobre el Guadalquivir como bailando galops de Seises en la noche cárdena. Es triste que en Andalucía se estén arrancando olivos centenarios para plantar pistachos de la variante Kerman, de origen iraní. Cuentan los agricultores que los olivos están estresados por la falta de lluvia. A una mala, siempre les quedará a los andaluces el olivo que llegó de Getsemaní, el huerto donde todos los discípulos  abandonaron a su Maestro durante su agonía y, también, donde se llevaron a cabo las tres negaciones de Pedro mientras el gallo cantaba. Ay,  Sevilla  siempre sorprende al viajero.

No hay comentarios: