Los turolenses están muy contentos con Rajoy por haberles ofrecido hoy banda
ancha para el año 2021 a una velocidad de 300 megabits por segundo. Ya que Teruel es la única capital de provincia
que no cuenta con línea directa de ferrocarril con Madrid, al menos podrán
tener internet a alta velocidad. Aquí, a este paso, vamos a tener que volver a
la onda corta para escuchar Radio España
Independiente en vista de la censura que ejerce Televisión Española, al servicio del Gobierno. Es curioso, cuando
el PP pone las barbas a remojar por el avance imparable de Ciudadanos en las
encuestas, Rajoy se acerca a Teruel después de haberse cerciorado de que
existe. Una provincia donde es conocedor de que la Ley D’Hondt, ese sistema electoral de cálculo
proporcional que divide el número de votos emitidos para cada partido entre el
número de cargos electos con los que cuenta cada circunscripción, le favorece.
El Gobierno se acuerda de santa Bárbara
cuando truena. Y ahora, cuando la mascletá política es ensordecedora, pone en
práctica el plan 300x100 para llevar las
últimas tecnologías a un medio rural cada vez más vacío, según avisa el
presidente, en un intento de que “no exista tanta diferencia entre vivir en
municipios poblados como en municipios vacíos”. Hombre, la diferencia es que en
unos sitios hay gente y en otros, no. Aplicar
el plan 300x100 a municipios en los que queda media docena de ancianos tiene su
guasa. Si esos ancianos aprenden a escribir en el teclado y a utilizar el WhatsApp lo tendrán mucho más fácil para
conectar con la Moncloa y acordarse de toda la familia del gobernante que no tuvo mejor quehacer que asar la
manteca.
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