martes, 23 de julio de 2024

Churras y merinas

 


Zamora es tierra de importantes quesos. Yo me quedo con el que elaboran en Monte la Reina. Concretamente con el  Queso Puro de Oveja Señorío de Montelarreina Gran Duque de Alba”, elaborados por  “Lácteas Castellano-Leonesas” en Fresno de la Ribera, filial de “Reny Picot” considerado como el mejor queso del mundo tras el logro de las medallas de Oro  y Plata  en el “World Championship Cheese Contest” en 2012,  celebrado en Milwaukee (Wisconsin, Estados Unidos). Pero, ¿por qué cuento eso? Pues por la razón de que todos los años se celebra en esa ciudad leonesa una feria del queso a mediados de septiembre, “Fromago Cheese Experience”, que incluye 1.200 variedades de quesos, todos ellos amprados por una mascota a la que este año se le pretende poner nombre y que representa la esencia quesera zamorana. Para su consecución, se ha abierto un concurso donde el ganador se llevará un lote de quesos y cuatro entradas para visitar los túneles del queso, dos espacios en cuyo interior se muestra un centenar de ellos (cincuenta nacionales en la plaza de Viriato y otros cincuenta en la plaza de la Catedral donde se podrán catar seis variedades en cada uno de esos espacios previo pago de entrada de cinco euros. Ya existe una lista con los nombres propuestos para ‘bautizar a la mascota, una oveja sonriente. Ya hay una veintena de nombres propuestos: Viriata, Zamoratina, Urraca, Borreguín, Ruli, Azemur, Calostra… Lo que ignoro es si la oveja que sirve de reclamo es de raza churra o castellana. Pero no hay que olvidar que existen otros quesos de oveja que merecen consideración: el feta de Bulgaria y Grecia, el roquefort de Francia, el manchego,  idiazábal y roncal, de España, el pecorino de Roma y el ricotta de Italia, entre otros. El producto es escaso, puesto que la oveja solo tiene dos pezones, y es más digestivo que el de vaca o cabra por su alto contenido de triglicéridos que favorece en menor medida el aumento del colesterol, así como un alto contenido de calcio, hierro y potasio, además de vitaminas A, C y E. Existen tres variedades de queso de oveja: curado, viejo y tierno. Terminaré recordando el dicho: “No hay que mezclar churras que merinas”. Las primeras ofrecen sabrosa carne y excelente leche; las segundas, la mejor  lana contra el afilado relente nocherniego  de La Guareña y el alfoz deToro.



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