El Castillo de la Vela

Lo sucedido con el castillo de la Vela, situado en  Maqueda (Toledo) sólo se le pudo ocurrir al que asó la  manteca. Un castillo construido a finales del siglo X y declarado monumento histórico-artístico en 1931, donde el Ministerio del Interior “enterró” 7’3 millones de euros en su empeño de convertirlo en un museo de la Guardia Civil y que ahora el Gobierno ha decidido poner a la venta por mucho menos dinero del capital invertido, es decir, que al final se podría venderse en 4’7 millones, en el supuesto de que existiese alguien interesado. También, de no encontrar comprador, podría adaptarse como hotel y ser incluido en la red de Paradores. La única pega sería la de estar muy próximo al Parador de Oropesa, a poco más de 70 kilómetros de distancia. A mi entender, puesto que la Guardia Civil es un instituto armado de naturaleza militar, podría haber integrado su supuesto museo en el Museo del Ejército, situado en el interior del Alcázar de Toledo desde 2008. Me parece una frivolidad el dinero público gastado en el interior de ese castillo cuando existen otras prioridades de más calado. El castillo de la Vela sirvió de residencia temporal a Isabel de Castilla, tras ser  reconstruido en parte por Diego de Cárdenas y Enríquez, hijo de Gutierre de Cárdenas, persona que se encargó, entre otros menesteres, de los trámites en secreto de Isabel de Castilla con Fernando de Aragón, el que redactó las cláusulas de ese matrimonio y que Fernando II aceptó. Fue nombrado Mayordomo Mayor del príncipe Juan, hermano de Isabel; ésta le encargó que negociara las condiciones de rendición de Málaga para que se hicieran de la manera más humanitaria posible. Isabel le concedió el privilegio de la toma de posesión en secreto de la Alhambra de Granada, por lo que fue el primero que entró en esa ciudad tras la Reconquista. Estuvo casado con Teresa Enríquez de Alvarado, “La loca del Sacramento”, según fuese motejada por el papa Julio II. Murió en 1529. Su hijo, Diego de Cárdenas fue nombrado en 1530 duque de Maqueda por Carlos I. Con anterioridad, en 1494, fue el encargado de redactar los acuerdos con Portugal en el Tratado de Tordesillas sobre el reparto de tierras a conquistar tras el Descubrimiento de América; fue el encargado de negociar el matrimonio de Juana “ La Beltraneja” con Alfonso V de Portugal, proponiendo la dote; escoltó a la princesa Catalina en 1501 hasta La Coruña para ir a casarse a Inglaterra con Arturo, Príncipe de Gales; y los Reyes Católicos le encargaron ir a recibir a su hija Juana  y a Felipe “El Hermoso” a la frontera con Francia, como heredera del trono de Castilla. Hasta hace pocos años, el Castillo de la Vela fue cuartel de la Guardia Civil y también hubo un destacamento de la Agrupación de Tráfico.