Lo acontecido en Aragón no sabemos cómo terminará. Lambán ha necesitado en Aragón la
alianza del PSOE con Podemos-Equo, PAR, CHA e IU para poder alzarse con el santo
y con la limosna. Es decir, un pentapartito mal avenido que le va a producir
muchos dolores de cabeza. Y Echenique,
que no es tonto sino malo, insta a Sánchez
a seguir el ejemplo de Aragón a nivel nacional. Dice Echenique que la gobernanza
en Aragón va a tener contenido diverso y va a estar llena de colorido. E
insiste en que hay que volver a sentarse con el PSOE precisamente ahora, cuando
los últimos sondeos sobre intención de voto señalan una clara ventaja
socialista en caso supuesto de tener que volver a las urnas en noviembre. Ja. Lo
ideal sería que antes del 23 de septiembre hubiese acuerdos pero sin coalición.
Y sin imposiciones de Iglesias. La portavoz
del Gobierno en funciones, Isabel Celaá
ha manifestado que “si no hay agua en la piscina, no merece la pena pasar por
una investidura”. Y yo matizaría que si no hay agua en la piscina, no debe uno
tirarte de cabeza desde el trampolín. El primer pentapartito de la historia de
la Comunidad de Aragón, es decir, esos pactos transversales de alquimia, que puede
terminar como el rosario de la aurora: a farolazos. Aliaga, presidente del PAR, dice ahora que “Aragón necesita más
atrevimiento que prudencia”. Ese imitador del funambulista Biel
(aquel político que en su día ensalzaba la labor de la alcaldesa de La Muela), ha conseguido alzarse con la
vicepresidencia en el nuevo gabinete de Lambán. Ese político a la violeta (totalmente desconocido
en los círcuitos políticos nacionales) sí que se ha alzado con el santo, la
limosna y las reliquias de Hipólito
Gómez de las Roces contenidas en un medallón de oropel que lleva al cuello
como un dogal. Ya veremos cómo terminan los fuegos de artificio llenos de
colorido tornasolado en el viejo caserón del Hospicio.
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