Hoy hace 181 años nacía Gustavo Adolfo Bécquer en Sevilla, en la calle Ancha de San Lorenzo, ahora Conde de Barajas, muy cerca de la
plazuela donde se halla el templo de Jesús
del Gran Poder, hoy convertido en basílica menor, como lo son también La
Macarena, Santa
María Auxiliadora y el Santísimo
Cristo de la
Expiación. Gustavo Adolfo fue el quinto hijo de José Domínguez y de Joaquina Bastida. Hace pocas fechas
comentaba que se está restaurando el órgano de Santa Inés que dio
origen a la leyenda Maese Pérez el
Organista. Un órgano que este año ha podido sonar gracias a Abraham Martínez, que lo afinó. Su
restauración y puesta a apunto está suponiendo un coste
muy alto, hasta el punto que en Sevilla se ha abierto una cuenta para recibir
donaciones voluntarias que pueden enviarse a la Fundación Alqvimia Musicae. La
Fundación se compromete a expender un certificado a todo aquel que haga donaciones
para que pueda ser desgravado en la Declaración sobre la Renta. En las transferencias deberá añadirse: “Para la
restauración del órgano de Santa Inés". Ya me gustaría que el alcalde Juan Espadas promoviese una idea similar
para reparar en profundidad la Venta de los Gatos. Como se contaba en eldiario.es (17/10/2015), “la Venta de los Gatos, de más de 200 m2, ha tenido muchos
dueños, el último una inmobiliaria. Hace un tiempo se quería vender por unos
600.000 euros y esa cantidad ha ido bajando hasta aproximadamente la mitad,
pero la venta conserva un valor sentimental y cultural que no tiene precio. El Ayuntamiento de Sevilla aprobó en 2012
una moción para recuperar el lugar, pero quedó solo en la intención. La
iniciativa cuenta con el apoyo de otros colectivos, como el Ateneo de Sevilla, la institución
literaria Noches del Baratillo, la
asociación cultural El Pinsapo, Busilis Escritores, la asociación Itimad y La Casa de los Poetas, entre otros. Yo visité
en cierta ocasión aquel ventorrillo sevillano, creo que fue a principios de los
70, y lo encontré muy destartalado. Ignoro en qué estado se encontrará ahora.
Supongo que peor.
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